“En la cocina no le pasaría eso”: Árbitra recibe comentarios machistas tras ser impactada con un pelotazo durante partido en España

El encuentro de La Liga Femenina entre el Real Madrid y el Athletic de Bilbao, se vio opacado por los comentarios machistas tras un accidente con la árbitra del partido.

El video se hizo viral y muchos, incluyendo hombres y mujeres, aprovecharon para hacer comentarios machistas.

Por Damaris Girón

2020-11-16 10:52:21

El encuentro de La Liga Femenina entre el Real Madrid y el Athletic de Bilbao, el pasado domingo 15 de noviembre, ha tomado gran relevancia en redes sociales y no por el resultado, en el que el equipo merengue ganó 1-0, sino por un accidente que sufrió Sara Fernández, árbitro del partido y que ha dejado en evidencia el machismo en ese deporte.

Al minuto 91 del partido, Fernández fue impactada por un fuerte pelotazo en la cara, tras un disparo a portería de la jugadora Naroa Uriate, del Athletic de Bilbao. Con el fuerte impacto, Fernández cayó al suelo y comenzó a gritar del dolor.

Foto/ Captura Twitter

El video se hizo viral y muchos, incluyendo hombres y mujeres, aprovecharon para hacer comentarios machistas que desacreditaban el trabajo de Fernández, alegando que había exagerado el dolor del golpe.

GALERÍA: Los desafortunados comentarios machistas tras golpe a árbitra en el partido Real Madrid y Athletic de Bilbao

Un usuario de twitter escribió: “En la cocina no le pasaría eso… que no arriesgue” otro escribió: “Yo he recibido balonazos peores en mis partes íntimas y no me he puesto así”, comentarios como estos inundaron las redes sociales y causaron indignación entre los internautas que mostraron su apoyo a la árbitra.

Foto/ Captura Twitter

El usuario @karl_lsc escribió: “Pero bueno como se puede ser tan mala gente opinando así, a veces el pelotazo no es cuestión donde te dé sino como te pilla en el momento del impacto para dejarte desorientado, mucho ánimo Sara”.

La mayoría de usuarios opinaron que este tipo de comentarios solo dañan el ambiente deportivo y demuestran que aún falta mucho trabajo para combatir la falta de empatía y el machismo.