ESPECIAL: Las “vacas gordas” de 1996 en el fútbol salvadoreño y el partido que no se dio ante Argentina
Fue 1996 un año en el que el fútbol salvadoreño pasaba por buenos momentos, tanto deportivos como económicos e incluso, se dieron el "lujo" de no aceptar un amistoso contra una selección de Argentina
Para resumir un poco lo anterior, por ejemplo, en el segundo semestre de 1995 el Comité Ejecutivo de Selecciones Nacionales (CESEN, brazo colegiado de la Federación Salvadoreña de Fútbol y la Primera División) contrató los servicios del famoso entrenador argentino José Omar Pastoriza, quien era (y es hasta la fecha) el técnico de más cartel que ha pasado por el fútbol salvadoreño.
Sólo hacer referencia de Pastoriza y su paso por el fútbol europeo (Atlético de Madrid y Marsella, por ejemplo) así como estar en las ternas para elegir al seleccionador argentino (Basile, Pasarella, Pastoriza o Basile, Grigol, Pastoriza) El Salvador se daba el lujo de tener a un caudillo del fútbol argentino… y pagar por ello.
Se remodeló el Albergue del Futbolista, y el tema salarial pasó a ser prioridad para la Selección Nacional. Erber Burgos, uno de los jugadores insignia del campeón FAS, era el mejor pagado con 42,000 colones mensuales (el salario en esa época en promedio era de 825.00 colones para el comercio y la industria) y otros emblemáticos jugadores ganaban entre los 20 mil y 30 mil colones mensuales.
El Salvador pasaba por época de bonanza económica. Durante la década de los 90 se registraron bueno niveles de crecimiento del PIB con hasta un 7.1% (actualmente apenas alcanza al 2%), si bien en el tema salarios había habido un decrecimiento, tal y como se había ido dando el comportamiento en los años previos (en el período 1979-1988 alcanzó el promedio más alto al llegar 1,738.44 en la industria y el comercio).