Ha aprendido para la vida. Eliodoro Portillo, el portero y capitán de la Selecta de Playa, sabe que el fútbol no lo es todo, y que algún día debe terminar ese ciclo deportivo, por eso es que se ha preparado para cuando llegue ese momento. Y lo ha afrontado con la mejor actitud.
Por eso es que, desde hace ya casi un año, el seleccionado playero decidió emprender. Puso manos a la obra y armó su propio negocio familiar, el cual ha ido creciendo poco a poco. Lo hizo justo en el momento en que la pandemia de covid-19 tenía al país en momentos de cuarentena. Sin embargo, como ser humano, también necesitaba invertir para llevar alimento a su hogar.
La conmovedora foto de Eliodoro Portillo que emocionó las redes: "El amor más puro que puedo tener"
Es así, y con la idea de poseer algo a futuro, en que Portillo creó el “Leo Moto Sport”, como se llama su negocio. Es un lugar donde se encarga de vender repuestos de motocicletas, accesorios e implementos deportivos, y el cual está ubicado en el Barrio El Centro de Chirilagua, en San Miguel.
“El negocio es de mi esposa, mi hija y yo. Vendemos repuestos y accesorios para motos, y también implementos deportivos. Tenemos 10 meses aproximadamente de tener el negocio”, resumió “Leo”, como es conocido en la Selección. “Por la situación que se ha estado viviendo a nivel mundial y nacional, nos ha afectado en las ventas, pero vamos hacia adelante”, añadió, en referencia a cómo ha podido prosperar la tienda.
De paso, también contó que no solo se han quedado con las compras presenciales, también hacen domicilios cercanos. “Estamos ubicados en Chirilagua, pegados a la casa comunal. Y brindamos servicio a domicilio en caso de que nuestro cliente tenga dificultades para retirar su producto o mercadería”.
Su sentir por haberse convertido de a poco en un auténtico emprendedor lo definió así: “Me siento como uno de muchos salvadoreños emprendedores. Contento de poder luchar en esto del negocio”. Y no olvidó sincerarse en cómo mira el negocio a futuro. “Espero que mi negocio, como el de los demás, progrese con la bendición de Dios y de nuestros clientes”.
El arquero está entrenando ahora para el Mundial de Rusia, con la Selecta. Pero con su emprendedurismo, Eliodoro ha demostrado que piensa en el después de su carrera, y que no solo se queda como jugador de playa. También, con su acción, se convierte en una figura pública de ejemplo para jóvenes y emprendedores.
“No puedo quedarme de brazos cruzados, solo viviendo el presente con la Selección. Debo pensar en el futuro de mi familia, y por eso estoy junto a mi familia en esto del negocio”, afirmó.
“Mi familia es quien más me motiva y me ayuda a salir adelante en el negocio”, reiteró, sobre de qué forma se da el apoyo de sus seres queridos en esta su nueva faceta.
Como buen emprendedor, también el playero fue claro en que espera que su negocio pueda ampliarse y dedicarse de lleno a esto. Pero hay algo más, de igual manera piensa en echar una mano a otros, como buen cuscatleco y migueleño que es.
“Espero en Dios en que me dé la oportunidad de ampliar nuestro negocio, para tener oportunidad de generar empleo para alguien más, porque no solo pienso en mí, sino en generar oportunidades de trabajo”, reflexionó. El mensaje de un guerrero de playa, de un guerrero de la vida.
