Carlos De Los Cobos y la Selección salvadoreña podrán decir misión cumplida, al cumplir los objetivos trazados en esta Liga de naciones, después de derrotar (2-0) a República Dominicana y con este resultado, aumentar la ventaja con Canadá, en el ranking FIFA. La afición se fue contenta con el equipo nacional.
La Selecta se jugaba el orgullo ante los caribeños, luego que el sábado con la mínima victoria ante Montserrat, ya había logrado el boleto a Copa Oro 2021 y el ascenso a la Liga A. Ante eso, solo rotó a David Díaz por Rodolfo Zelaya, que se lesionó el sábado y Andrés Flores Jaco jugó en vez de Gilberto Baires.
Se percibió un ambiente diferente en el estadio, en comparación al del sábado anterior. El gol en los primeros quince minutos de Juan Carlos Portillo hizo que el combinado nacional soltara muchísima presión y eso se reflejó en la celebración, en cada uno de los jugadores que estaban en la cancha, todos los miembros del banquillo y también varios aficionados que habían llegado los dos días.
Dentro del dominio que fue ganando la Selecta, Juan Carlos Portillo volvió a ponerse la capa de “súper héroe”, al marcar un gol en el que tuvo mérito por la persistencia: controlar pelota, meter un centro y al ver que la pelota le quedó, tirar a portería, para definir cruzado ante el portero Miguel Lloyd (15’). Algunos lo consideraron un golazo, otros, un motivo para volver a creer.
De allí en adelante, el partido no presentó mayores sorpresas, porque el primer tiempo terminó con la selección nacional con la posesión del balón, pero sin provocar demasiado peligro frente al arco, incluso, al arranque del juego, la afición daba “olé, olé” a los visitantes.
Con aplausos y algunos halagos, la Selección se fue al descanso aprobado por la afición en el Estadio Cuscatlán, mientras los jugadores caminaban con la frente en alto. Pero el segundo tiempo tuvo la misma imagen del primero, con República Dominicana generando las primeras aproximaciones de peligro. Dos de ellas, con el atacante Domy Romero sacando disparos desviados (46’ y 50’).
A partir del minuto 70, la afición empezó a pedir el ingreso de Pablo Punyed. Diez minutos después, el técnico De los Cobos complació, con el jugador quien milita en el fútbol islandés. Lo hizo por Óscar Cerén, pero unos minutos después utilizó el puesto de Marvin Monterroza, quien salió por Rubén Marroquín.
Punyed le dio otra cara a la Selección, para controlar los tiempos y convirtiendo el segundo gol, en la segunda llegada del equipo nacional desde su ingreso a la cancha. Jaime Alas ahora tuvo el tiempo para recorrer la banda izquierda y meter un centro, tras ganar línea de fondo, el cual cerró Punyed, sin marca (86’).
Esta anotación sentenció la victoria para El Salvador y desató la alegría de los aficionados salvadoreños, quienes terminaron el partido con el grito de “El Salvador… El Salvador…”.