La raqueta está guardada. La cancha de tenis, lejos. Pero la pandemia por el coronavirus (Covid19) está muy presente en la vida del tenista salvadoreño-español Lluis Miralles. Ahora, más que nunca, el nacional está jugando otro partido, y lo está ganando. Sí, porque se enroló como voluntario en Barcelona, España, para ayudar a todos los que necesitan de su “granito de arena”, como él lo describe.
Y es que un mes ha pasado rápido para el tenista. Un mes desde que decidió cambiar un encierro que de poco servía, más que para salvaguardar su vida, para entregarse por completo a una buena causa y ponerla en un primer plano. Esa que lo ha llevado a ser ayudante al servicio de los médicos y de las familias pobres españolas, a través de la Asociación Health Warriors (Guerreros de la Salud).
“Ayudar a los demás es algo que siempre me ha gustado y me ha llenado, y (lo he hecho) a través de voluntariados cuando estaba en el colegio y ahora en la Universidad. Es algo que me llena y me ha gustado”, contó Lluis.
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“Todos sabemos que en este momento el coronavirus está haciendo mucho daño a todos los países y a muchísimas familias. Entonces, desde mi casa, encerrado, estando todo el día sin hacer nada, pensé que lo único que podía hacer era intentar ayudar y aportar algo a la sociedad”, reflexionó.
Según contó Miralles, quien jugó la Copa Davis en dobles, en marzo pasado, y ayudó a mantener al país en la Zona II Mundial, esta Asociación la creó un amigo (Francesc Terns) de su “club de tenis, el Real Club de Tenis Barcelona”, en solitario, pero “poco a poco fue creciendo”. Y se sinceró en que a través de conocer, por redes sociales, lo que la Asociación hacía y que “compartía historias y momentos de reparto” realmente se interesó en todo.
“Así, a través de conocer esto y las ganas que tenía de poder ayudar empecé a hacer esta de forma voluntaria, sin ánimo de lucro, para simplemente aportar algo a la sociedad”, enfatiza.
El tenista detalló que, al principio, solo asistía “los martes y los jueves, toda la mañana, y hacía los repartos a centros sanitarios”. Pero “desde hace dos semanas”, está “todos los días, por la mañana y por la tarde, haciendo repartos y recogidas de donaciones, comidas, bebidas”. “Cada vez, estoy más involucrado y ayudando muchas más horas”, dice.
El salvadoreño sostuvo también que ya han beneficiado a un número amplio de personas: “Nosotros estamos en Barcelona, pero hacemos repartos también en Cataluña. Con mi grupo, nos dedicamos a ayudar en nuestra región. Empezamos en hospitales, hay muchísimos que han recibido nuestra ayuda, y ahora también lo estamos haciendo con asociaciones que ayudan gente. Es un número alto al que hemos ayudado (160 mil personas, en casi dos meses)”.
Es uno de los mejores boxeadores de El Salvador y está con serios problemas económicos. Por la pandemia, cerró la fábrica donde trabajaba, perdió sus ahorros y hoy hace delivery para no pasar hambre.Sin embargo, se entrena en su casa a la espera de volver al ring.
Un giro para su vida
Miralles estudia Business Administration, en la Universidad Winthrop en Carolina del Sur, Estados Unidos, y ha tenido que concluir sus estudios, ahora en mayo, en línea. Así que ha tenido que dividir su tiempo entre la carga académica, la ayuda y la actividad física. Sin embargo, describe que ha valido la pena.
“Mi rol, en la Asociación, sobre todo consiste en la recogida y el reparto de donaciones, como alimentos, bebidas y otros. ¿Cómo? Es con el coche personal y solo. Recojo en locales donde nos hacen las donaciones o en el almacén que tiene la asociación. La donación que queremos hacer la llevo a hospitales, a centros sanitarios o a otras asociaciones, y la entrego. Y vuelvo al almacén y hago otra entrega. Así, sucesivamente, cada día”, explicó, sin dejar de lado que a veces le toca adoptar otros roles o hacer horas extras, pero siempre está “dispuesto a ayudar”.
La recompensa, según aseguró el atleta quien asistió a los pasados Panamericanos de Lima 2019, es la satisfacción de dar. “Es algo increíble poder ayudar a toda esta gente y poder ver las sonrisas que se ponen en sus caras cuando les puedes dar comida, bebida, sea lo que sea, ellos lo agradecen. Y esto, al final, es lo más bonito, poder aportar a la sociedad, si estás en la posición de hacerlo, y poder contribuir en algo en estos momentos en que todos lo estamos pasando tan mal, pero sobre todo a los más desfavorecidos. Eso es lo que te llena y te hace seguir ayudando y avanzando”.
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Toda esta experiencia ha cambiado la vida de Miralles, quien acepta que, “en este momento, la solidaridad ha significado todo. Poder ayudar a la gente que más lo necesita, que está sufriendo, ver cómo realmente la ayuda está marcando una diferencia en sus vidas. Un sanitario que pueda comer, una familia que no puede darle comida a sus hijos”.
“Poder aportar y ayudar a aquellos con los que no tenías ningún tipo de contacto, relación, que no conoces, pero que con esta iniciativa has llegado a conocer y a ayudar, eso es algo increíble. Creo que la solidaridad, en este momento, es lo que va a marcar la diferencia en cómo podemos salir adelante como país y en el mundo”, reconoció.
Miralles sostuvo que echa de menos su deporte, pero no ha cesado en sus entrenamientos físicos. “He estado entrenando, como no se podía salir de casa, como la mayoría de gente: haciendo ejercicios en el salón de casa, con el material disponible, haciendo lo que se podía, para mantenerse en forma y para que cuando todo esto termine nos afecte en lo más mínimo posible a nuestro nivel físico”.
“No he podido jugar tenis y las canchas están cerradas, pero sí el entreno físico lo he practicado mucho. Esto he hecho para poder seguir mentalmente fresco”, agregó.
La valoración del tenista es que el voluntariado marcará su vida. “Tanto como atleta y persona, esta situación me ha hecho darme cuenta de lo que realmente es importante. A veces, en la vida, nos fijamos solo en pequeñas cosas o en cosas sin importancia, y le damos más importancia de la debida a cosas que no las tienen. Pero poder ayudar a los demás, ver las condiciones en la que están los desfavorecidos y poder hacer algo, es darte cuenta de lo que realmente importa y poner un orden de prioridades en tu vida. Este momento me va a cambiar bastante y va a ser que sea mejor persona”, puntualizó el tenista, quien seguirá con su labor hasta donde pueda.
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