Cuando el corazón es noble, la bondad aparece. Y si se trata de compartir, a cambio de un bien común, son pocos los héroes que aceptan anteponer lo de los demás al bien propio. Esta vez, esto se hizo realidad por intermedio del surfista salvadoreño Yonathan Hernández. El ejemplo de un chico de 19 años que prefirió que no le hicieran una donación de una tabla de surf a cambio de que sí se les entregaran víveres a las familias de su comunidad, en la playa El Cocal, en La Libertad. La Federación Salvadoreña de Surf (Fesasurf) publicó, en su cuenta de facebook, el notable gesto. “Joven porteño, Yonathan Hernández, iba a recibir una tabla de surf de parte de su patrocinador (su amigo Javier Suárez) para los World Surfing Games de mayo (en el país) y, en vez de eso, pidió que le donaran víveres para sus vecinos. Historias que nos tocan el corazón”, postearon.
En la misma, el preseleccionado nacional comentó: “Yo sé que era una decisión dura para mí, porque sé que era una tabla y es algo que yo siempre quiero que nunca falte en mi deporte. Pero ahora, estamos en momentos muy duros para muchos que lo necesitan, y tomé los víveres para poderlos compartir con mi comunidad. Es el momento de unirnos todos y ayudarnos uno al otro”. Su acción, sin embargo, nació de su enorme corazón y el de su padre, Sergio Hernández, quien lo ayudó a tomar la decisión. El surfer, quien este año pasó a la categoría Open y está como preseleccionado nacional, contó a Cancha cómo se sintió: “Yo tengo patrocinadores y uno de ellos me dijo: ‘¿Qué tú quieres una tabla o unos víveres?’. Entonces le pedí tiempo para pensarlo. Hablé con mi papá y acordamos que mejor era pedir los víveres”. “Él (su padre) me dijo que estamos pasando momentos duros y algunos necesitan, y por eso le dije a mi papá: ‘Yo sé’. Le dije a mi amigo que mejor necesitaba los víveres, para compartirlos en la comunidad, y lo de la tabla después se puede ver cómo se compra una, cuando pase todo esto. Él me repreguntó: ‘¿Estás seguro de que querés los víveres?’. Y le contesté: ‘Sí. Es mejor compartir ahorita’”, agregó. El juvenil, quien entre sus mejores logros ha sido el tercer lugar en 2019 de la categoría Junior, a nivel nacional, externó: “Me siento feliz el haberles regalado a ellos. Se los doy con mucho cariño, no así por así, como diciendo tomen y ya, solo por darlos. Sé que es poquito, pero se los doy con cariño, y me siento contento por eso”.
Hernández contó que benefició a un promedio de 20 familias de su comunidad, y que no lo amplió a más ya que no quería contaminar su lugar de residencia si llegaban muchos extraños. Detalló igual el contenido de las canastas alimenticias: frijoles, arroz, leche en polvo, avena y papel higiénico; y las de bebidas: un medio galón de jugo, seis medios litros de jugo, gelatinas y nieves. “Son sencillas, pero se las di con todo cariño”, repitió. “Mi padre me dijo que no podía arriesgar a que vinieran personas de otros lados, de otras comunidades, al decirles que habían víveres, por eso lo hicimos reducido solo con los que viven cerca. Era como tener más precaución y cuidar la salud de todos, por eso los fui llamando también uno por uno”, manifestó. Además, reconoció que parte fundamental de esto ha sido la enseñanza de don Sergio, con quien vive, y lo que lo ha hecho ser unido y dadivoso, escuchar sus consejos y ser obediente. “Él me está enseñando a compartir con todos, porque yo soy así pero solo con mis amigos, con los que surfeo, pero él me ha demostrado que hay que hacerlo con los que lo necesitan más y ser humildes. Esto me ha cambiado mucho la vida. Es una sensación que nunca me podría haber esperado”.
Yonathan cuenta que tiene ocho años de practicar el surf, llegó hasta noveno grado, y trabaja cuidando un rancho en la playa donde reside. Pero tiene ya sueños en grande. Desearía competir en el exterior y algún día llegar a unos Juegos Olímpicos. “Siempre he querido ir a otros países a competir, con patrocinadores, y representar bien al país. He competido en el Alas, pero mi meta es dar mejores resultados de los que he dado”. “Quiero decirles a todos que seamos positivos en este momento tan duro, que estemos unidos y que nadie se olvide de que no se debe salir de casa, si no es necesario”, reiteró este surfista, quien cerró diciendo que, de ahora en adelante, aprendió “a que hay que compartir con la gente siempre”. El mensaje de un héroe de las aguas.