???Sueño con ser el primer salvadoreño en la Fórmula 1???

Se llama Sebastian Melrose, tiene 18 años, nació en Escocia y su madre es salvadoreña. Corre en la Formula Ford y su padrino es el expiloto Dario Franchitti

descripción de la imagen

Sebastian Melrose, en el circuito de Silverstone, donde habitualmente se corre el Gran Premio de Inglaterra.

/ Foto Por Cortesía Sebastian Melrose

Por Claudio Martínez | Twitter: @martinezchino

2016-05-03 7:10:00

“Era buen delantero, goleador”, confiesa Sebastian Melrose cuando habla de él como futbolista. Hasta los 15 años años jugó en las divisiones menores del Hearts y del Dundee United, ambos de la Scottish Premier League, a pesar de su fanatismo -que viene de familia- por el Glasgow Rangers. Pero un día todo cambió para este escocés con sangre salvadoreña, pues su madre, Janice De Souza, nació El Salvador….

Ese día, allá por junio de 2013, su abuelo, Stewart Melrose (p), lo llevó a Las 24 Horas de Le Mans y quedó fascinado. Seb, como le llaman cariñosamente, tuvo la posibilidad de ver de cerca cómo trabajaba el equipo Aston Martin Racing y no hubo manera de despegarlo del circuito. “Yo me quería ir a dormir, y él seguía ahí a las 2 de la mañana con el mismo entusiasmo”, recuerda su abuelo.

La idea original de aquel viaje a Le Mans era que el joven se interiorizara del funcionamiento de los motores, ya que planeaba estudiar ingeniería mecánica. “Ese día me convencí que quería ser piloto de autos”, dice Seb, vía telefónica, desde su residencia en Bathgate, un pequeño poblado escocés ubicado casi a medio camino entre Glasgow y Edimburgo.

Poco más de un año después, en 2014, ya estaba corriendo en el circuito de Brands Hatch en el Formula Ford Festival. Con apenas 16 años hizo su primera experiencia. “El caso de Seb es muy particular, él nunca corrió en karts, que es lo que hace la mayoría antes de subirse a un carro. Él jugaba fútbol”, relata su padre Stewart, en perfecto español.

La bandera de El Salvador destaca en sus participaciones de la Fórmula Ford.

Una persona que fue clave en la decisión de convertirse en piloto fue su padrino de bautizo. Los consejos de un padrino siempre ayudan, pero si el tuyo se llama Dario Franchitti –piloto leyenda escocés, cuatro veces campeón de IndyCar y tres veces ganador de la Indy 500-, sin duda que mucho más. “Dario ha tenido mucha influencia. Él es gran amigo de mi padre, fueron compañeros de colegio y se conocen desde entonces”, reconoce Sebastian, que para hablar prefiere el inglés al español. De hecho, el primer interés por los autos de carrera viene de 2007, cuando Seb vio en persona, en el Chicagoland Speedway, cómo Franchitti se coronaba campeón. 

Desde 2015 corre para el Graham Button Racing Team en la Formula Ford escocesa, donde el año pasado acabó quinto en el campeonato. Este año, con apenas dos jornadas disputadas, marcha en cuarto lugar. A sus 18 años, Melrose no se pone límites y piensa en grande: “Mi idea es correr aquí este año y el año próximo viajar a Estados Unidos para intentar crecer y competir en otra categoría. ¿Sueños? Sueño con ser el primer salvadoreño en la Fórmula 1, sería fantástico. O correr en IndyCar, ¿por qué no? Mis espejos son el colombiano Juan Pablo Montoya y el mexicano Checo Pérez”.

¿Cuán salvadoreño es Seb Melrose? Mucho. “Yo me considero mitad escocés y mitad salvadoreño, por supuesto. He ido varias veces a la tierra de mi madre, un lugar que me gusta mucho. La última vez fue en la Navidad de hace dos años, aunque no tuve la posibilidad de conocer el autódromo de allí”, cuenta el piloto. Pero más que sus palabras, hay un par de hechos que lo demuestran. Tanto en el carro como en su casco luce orgulloso la bandera de El Salvador junto con la de Escocia. El eslogan es “corazón escocés, sangre latina”. Además, en su armario nunca falta la camisa de la Selecta, un regalo de su abuela.

Aún en las frías noches de Bathgate, siempre hay espacio para unas buenas pupusas que prepara mamá Janice, quien hace mucho tiempo se enamoró de un escocés (ver nota aparte) que venía a vender camiones y repuestos a El Salvador y se fue a vivir al Reino Unido para formar una familia. “Gracias a mi madre hablo español, pero ahora he perdido un poco. Cuando era niño lo dominaba mejor que el inglés, pero con el tema de la escuela le tuve que dar prioridad al otro idioma”, explica, ahora sí en español, Sebastian.

Además de su rol de piloto, Sebastian está estudiando “Businnes Managment” en la Universidad, pero lo tiene claro: “Si sale una oportunidad para ir el año que viene para ir a correr a los Estados Unidos, dejo todo y me dedico tiempo completo a ser piloto profesional”.

El Salvador-Escocia, una historia de amor

Sebastian Melrose nació el 12 de enero de 1998 en Bathgate, Escocia. Su padre, que nunca tuvo que ver con el mundo del automovilismo deportivo, es un escocés llamado Stewart Melrose, propietario de empresas como Scotwaste, dedicada a la recolección y reciclaje de residuos, y de Melrose International, una compañía que comercializa camiones y repuestos por todo el mundo.

“Yo viajaba mucho porque me dedicaba a vender camiones. Iba mucho a Centroamérica, mucho a El Salvador… Y así, en uno de esos viajes, conocí a Janice De Souza, mi esposa. Lo curioso es que yo le vendía camiones a su mamá, y al final terminé casándome con su hija y nos vinimos a vivir a Escocia”, narra Stewart, quien confiesa que adora nuestro país.

“De El Salvador me gusta todo, el clima, la gente, la comida… Todo. Además viví tres años allí, y cada vez que podemos viajamos”, agrega el escocés.