No está lejos de vivir la cuarentena domiciliar como cualquier otro atleta. Encerrada. Haciendo trabajo físico en casa. Sin salir. La diferencia es que la tiradora Sofía Paiz, de nacionalidad guatemalteca, está sobrellevando esta etapa por el coronavirus (Covid19) sola, lejos de su casa, literalmente: en otra tierra.
Está en El Salvador, pero subsistiendo a la pandemia porque tiene sueños por cumplir. Su mente está puesta en representar a El Salvador, sí, a esta patria y no a la suya, y un día poder convertirse en campeona del mundo. Este último objetivo lo ha tenido claro desde que llegó al país, hace cinco años, y viviendo en suelo nacional los últimos 10 meses, entrenando con el campeón panamericano Roberto Hernández, en la modalidad de arco compuesto. Sin embargo, en su presente, solo está terminar la cuarentena domiciliar y salir al campo a tirar.
“Ha sido difícil y aburrido. Sola siento que el día es eterno, así que me he organizado un poco para mantenerme más entretenida”, se sincera. “Extraño demasiado ir a entrenar. De pasar en el campo casi todo el día, a estar en casa 24/7, es un cambio muy drástico. ¡Ya quiero volver!”, reitera Paiz.