Quique Arathoon navega hacia Tokio

El único salvadoreño clasificado a la fecha a Juegos Olímpicos aprovechó el viento para entrenar y compartir conocimientos con otros atletas locales.

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Enrique Arathoon, durante un evento pasado. / Foto Por Archivo

Por César Najarro / Twitter: @cjnajarro

2020-01-08 4:00:40

Con vientos de aproximadamente 14 kilómetros por hora, el velerista salvadoreño Enrique Arathoon aprovechó su estadía en el país para entrenar en el Lago de Ilopango, a donde también compartió su experiencia con la nueva generación de regatistas.

Quique se prepara para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, evento al que, a la fecha, es el único salvadoreño clasificado.

“Vengo para entrenar, para compartir con los chicos que están aprendiendo, para enseñarles un poquito de lo que he aprendido”, dijo Arathoon quien, antes viajar a El Salvador para disfrutar con su familia las festividades de fin de año, realizó una base de entrenamiento en España, bajo las órdenes de Javier Hernández, representate a su país en los Juegos Olímpicos de Beijing.

“Hicimos cuatro semanas de físico, o sea, siempre navegamos, pero lo que trabajamos es complementario al barco; un día de gimnasio, un día de bicicleta, un día de gimnasio, un día de bicicleta, tres sesiones de fuerza a la semana y dos o tres de bicicleta, dependiendo de qué día toca, dos horas más, y el último fondo”, explicó el atleta, quien comentó que están trabajando con su entrenador en ciclos de cuatro.

Las cargas en la primera semana son menores, pero las irá subiendo a partir de la tercera. La cuarta será de recuperación, pero comenzará también a pasar más tiempo en navegación y a reducir a media hora la bicicleta.

“Lo que queremos es optimizar el tiempo en el agua, pero si son días normales, un día hay viento, otro no, la intensidad del trabajo puede ser fuerte fuera del agua. Luego, durante las regatas, generalmente hacemos dos horas a la semana para mantenernos, hacemos siempre bicicleta, y simplemente trabajamos en dejar toda nuestra energía en el agua”, afirmó Quique.

El atleta salvadoreño aclaró que la vela es un deporte que se adapta mucho y depende de la intensidad del viento, por eso es difícil seguir un plan rígido para el entrenamiento, aunque, si hay condiciones normales, se sigue a la perfección.

Este mes, competirá en la Copa del Mundo. Luego, en febrero, participará en el Mundial. “En ambas competencias vamos a poner en práctica todo lo que hemos trabajado en la temporada, y tendremos un panorama del resultado que podemos obtener en Tokio 2020”, explicó Arathoon.

En marzo, participará en la regata europea; en abril, en la segunda copa del mundo. Luego volverá a competir a nivel del viejo continente, y cerrará con la final de la Copa en Japón.