Con un buen desempeño como resumen del torneo. Así terminó, la noche del martes (horario salvadoreño), su actuación en el Abierto de Australia (AO) el sonsonateco Chelo Arévalo. El nacional perdió en cuartos de final, junto a su compañero Matwe Middelkoop (Países Bajos), y volvió a quedarse a un pasito de quebrar la historia de alcanzar las semifinales de un Grand Slam.
Parece que siempre Australia es el destino, en la temporada, con el que mejor calza el tenista nacional, ya que llegar hasta cuartos es un enorme mérito. Sin embargo, el sueño de seguir adelante se terminó, tras perder 0-2 ante el brasileño Bruno Soares y el británico Jamie Murray, hermano mayor de Andy Murray, por 6-3 y 6-4.
El partido duró una hora con 13’, y Arévalo y Middelkoop dieron pelea, pero no fue suficiente ante los remates de los rivales y los errores no forzados. Salvadoreño y europeo tuvieron un 61% (23/38) de puntos ganados con el primer servicio y 50% (7/14) con el segundo; un 25% (1/4) de puntos de break salvados. Quebraron a sus rivales en solo una ocasión (segundo set, para el 4-4).
“Muy buenas sensaciones. Fueron dos semanas muy buenas, creo que siempre es lindo hacer un buen resultado en un torneo Grand Slam, que para nosotros es lo más importante que hay en nuestro deporte”, declaró a Cancha.
“Contento, porque no tenía ninguna expectativa cuando recibimos la noticia de que íbamos a pasar 15 días sin tener chance de salir de la habitación. Fueron casi 15 días prácticamente perdidos, en los cuales no tuvimos oportunidad de entrenar, hacer preparación física, encerrado en la habitación, mentalmente fue bastante difícil, y aunque no parezca el cuerpo se resiente cuando uno ya sale de esos 15 días de estar inactivo y querer arrancar al 100%, si no se hace bien el cuerpo no resiste este nivel”, aseguró.
“Estoy muy contento y agradecido con Dios que el cuerpo pudo resistir. Y a pesar de que no teníamos ninguna expectativa, al perder esos 15 días y estar improvisando en una habitación pequeña, con ejercicios pues no es lo mismo que en una cancha de tenis, en un gimnasio, entrenar al aire libre como los otros jugadores. Contento por eso”, reiteró la raqueta número uno del país.
Para Arévalo, lo que se logró fue parte del reflejo de lograr “manejar muy bien el tema de la recuperación de esos 15 días de la cuarentena” y el “llegar a cuartos de final” lo deja “motivado”.
“Hay que seguir, sé que no puedo ser conformista, tenía muchísima confianza de que podíamos ganar este partido, tal vez ahora no fue nuestra mejor actuación, no nos sentíamos cómodos en la cancha, con mi compañero, tenísticamente, pero hay que darle también mucho crédito al rival. Ellos jugaron un buen partido, un excelente partido, superándonos, y por ahí que no nos sentimos tal vez de una manera cómoda”, resumió Chelo.
Arévalo quedará así entre las mejores ocho parejas del planeta, y sabe que este ha sido un buen arranque de temporada. Además, enfrentar a los sembrados seis, y pareja con rankings 5 y 22 del mundo, no es fácil. “Igualmente, acá no hay excusas, jugamos contra dos grandes rivales que son campeones y eso nos motiva a seguir trabajando más duro, para la próxima vez que nos enfrentemos a ellos tomar revancha”, dijo.
“Este ha sido un principio de año excelente. Nos va a motivar mucho para seguir adelante y con buenas vibras para los próximos torneos que se vienen para las próximas semanas”, cerró.