Una situación espantosa se vivió durante un partido de fútbol americano en Alaba, Estados Unidos, cuando se enfrentaban las escuelas secundarias de Vigor y Williamson. En medio del encuentro, se escucharon varios disparos. Inmediatamente, los jugadores, aficionados y porristas se lanzaron al suelo para tratar de protegerse en medio de la confusión y el caos.
Según el informe policial, el tiroteo ocurrió en una de las rampas de ingreso al estadio, y tres hombres y una mujer (dos menores de edad entre ellos) resultaron heridas y tuvieron que ser trasladados a hospitales de la zona.
Según Paul Prine, el jefe de la policía del condado de Mobile, una de las víctimas estaba en estado crítico y se temía por su vida luego de ser alcanzado por un disparo en el complejo deportivo Ladd-Peebles.
En las redes, se mostraron imágenes del tiroteo, pero solo se ve el desorden y se escuchan al fondo los disparos, mientras los jugadores comienzan a correr por el campo para resguardarse antes de lanzarse al suelo. En las tribunas, la gente corría y se escondía como podía. El partido ya no finalizó.
“Los disparos se realizaron en la rampa oeste”, dijo Prine, a donde se encontraron cuatro casquillos, pero se sospechaba que fueron siete disparos en total. Según las primeras versiones de la policía, “tenemos varios individuos que pueden estar involucrados, pero posiblemente solo un tirador”.
“Es triste porque nuestras comunidades sufrirán después de algo así”, dijo Melvin Pete, el entrenador de Williamson al sitio Ai. Mientras que John McKenzie, de Vigor, comentó que “estas cosas pasan y ¿qué puedes hacer? Tenemos que ser un ejemplo y cambiar la vida de estos niños”.
La policía tenía información que al menos dos personas huyeron de la escena en un vehículo blanco, pero no había más información hasta el momento, y tampoco se han registrado arrestos.
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