No entiendo a quienes dicen que no deberíamos haber jugado contra Brasil. Que no somos rival para los pentacampeones del mundo. Que esos fogueos no dejan nada de enseñanza y que al contrario dejan frustrados a los jugadores y a la afición.
No los entiendo porque antes han pedido fogueos serios, con rivales que muestren el potencial -si lo tienen- del jugador salvadoreño. Rivales que destapen los errores y las carencias de nuestro fútbol.
No los entiendo por qué cuando aparecen rivales como Brasil, Argentina, Chile, España, etc. y nos golean -lo cual es previsible- criticamos y rechazan esos mismos fogueos que han pedido anteriormente.
Creo que son estos rivales los que de verdad nos muestran nuestro lugar en el planeta fútbol. No Montserrat, no Guyana, no Belice, con todo respeto, esos rivales lo más que pueden hacer es estancarnos o mostrarnos un espejismo si logramos ganarle holgadamente y si no, si le ganamos ajustados, como pasó con Montserrat, entonces sí dejan frustración.
Si hay algo positivo que se le tiene que ver a fogueos como los de Brasil, incluso con su 5-0; Argentina, con su 2-0; España, con su 2-0, es que nos enseñan, más que frustrarnos. Nos muestran lo que nos hace falta para escalar en el fútbol internacional.
¿O había alguien que albergaba la esperanza de ganarle a Brasil? ¿Alguien ignoraba que nos arriesgábamos a una goleada contra Brasil?
Pedimos roce de calidad para nuestros jugadores y cuando lo tienen, o se los dan, criticamos que demasiado rival, que esos partidos no se deberían de dar. Entonces, ¿en qué quedamos?.
Jugamos con rivales que nos pueden dejar mucho, o nos conformamos con aquellos que, aunque nos cuesta ganarle, no nos dejan nada de aprendizaje, solo la sensación de que retrocedimos en el fútbol, aunque no nos muestren cuánto. Para mí, que vengan más Brasil para foguear a la Selecta.