El Comité Ejecutivo de la Federación de Fútbol que acaba de terminar su período de cuatro años, tuvo variados “éxitos” como los que se detallan a continuación:
- Falta de patrocinios que desembocaron en un notable déficit económico a lo largo del período 2014-2018.
- Ninguna Selección clasificada a mundiales. Fueron eliminadas sucesivamente en eliminatorias las Sub-17, Sub-20 y Selección mayor. Las selecciones femeninas sufrieron igual suerte. Tampoco se logró clasificar a una asidua concurrente a Mundiales, la Selección de fútbol playa. Primera vez que sucede desde la creación de esta Azul playera.
- Escándalos varios: peleas con jugadores referentes de la Selecta; acusaciones cruzadas con dirigentes de la Primera división; varias fechas FIFA desperdiciadas; denuncias de “compra de voluntades” en elecciones; contratos de TV y con un nuevo entrenador que iba más allá de su vigencia como Comité (algo que habían criticado y jurado que nunca harían); venta de boletos para Rusia 2018 sin difusión para quien quisiera entradas.
- Falta de planes de desarrollo a nivel de fútbol infanto-juvenil, además de que se cortaron sistemáticamente procesos de selecciones juveniles.
- Infraestructuras cada vez más deterioradas y lejanas del desarrollo del fútbol.
- Renuencia y negativa a modificar los estatutos de la Federación, ya prehistóricos.
- Disparates con los entrenadores de la Selección Mayor. Se obligó a la renuncia de Albert Roca cuando se encontraba en lo mejor del proceso, se contrató a Primitivo Maradiaga con los peores resultados de la historia. Se despidió a Eduardo Lara, reconocido cuando la empatía con los jugadores y los atisbos de buen juego empezaban a dar resultados.
- Entre muchos otros errores, para sintetizar: Incapacidad demostrada para gestionar el mayor deporte del país.
“No vamos a negar el fracaso. No se obtuvo ningún resultado. Ninguno”. El que dio las declaraciones no fue uno de los cientos de críticos del Comité ni ninguno de los periodistas a los que se ve como “enemigos” en el tercer piso del edificio de Escalón. Lo dijo Jorge Rajo a El Faro.
El resultado de tanto descalabro y dislates de hace 4 años fue el premio de la “Reelección” para tres miembros de los siete del Comité. Y no solo reelegidos, sino con los cargos más importantes Hugo Carrillo (como presidente), Emerson Ávalos (vice primero) y Américo Aguilar (director).
“Patas arriba, la escuela del mundo al revés” fue el título de un maravilloso libro de Eduardo Galeano sobre los absurdos que dominan el mundo. La Fesfut tendría un capítulo exclusivo y profuso en ese reino de los despropósitos.