Messi y los mundiales

Una columna de Gustavo Flores

descripción de la imagen
El delantero argentino Lionel Messi durante el partido de octavos de final ante Francia en el Kazan Arena. Foto AFP / Luis Acosta

Por Gustavo Flores | Twitter: @Gusflores21

2018-07-02 8:32:21

Como el dilema del huevo o la gallina, los Mundiales pasan y la pregunta sobre Messi siempre es la misma ¿El equipo argentino no acompaña a Lio o él no acompaña al equipo? ¿Lo dejan solo o él no aporta a la albiceleste? La verdad, las dos cosas.

Se espera mucho de Messi porque es el mejor jugador del mundo. Pero ese rótulo bien ganado para la mayoría (excepto para la FIFA que solo tiene en cuenta quien gana la Champions para dar ese premio a la figura del equipo campeón) lo lleva por su enorme y extensa trayectoria en el Barcelona. Es el mejor hace varios años a base de grandes actuaciones, goles, títulos, récords. No lleva esa “chapa” de ser el número 1 por su rendimiento en la Selección Argentina, eso está claro.

Rusia 2018 fue su peor mundial. Antes había jugado muy joven parte del 2006 (Pekerman nunca lo puso en la eliminación en cuartos ante Alemania, una sombra que todavía persigue al hoy técnico de Colombia), había sido la figura sin gol en el turbulento Mundial de Sudáfrica 2010 bajo la tutela de Maradona. Y había comandado a Argentina hasta la final de Brasil 2014 pero sin terminar de brillar, excepto por sus goles en la fase de grupo (nunca pudo marcar en fase de eliminación directa).

¿Qué fue del capitán de la Sub 17 del “Pájaro” Huezo?

Fue capitán y bastión en defensa de una de las generaciones más notables en Selecta Sub 17. Ahora, aún con mucha juventud, la rompe en el estructurado y sesudo mundo de la arquitectura

En Rusia 2018 jugó en su nivel solo el primer tiempo ante Nigeria donde, eso sí, marcó un golazo tras un pase milimétrico de Banega.

Pero el resto de los partidos estuvo lejos del rendimiento esperado. Mal ante Islandia, a pesar de que intentó por todos lados. Y muy mal ante Croacia, donde ni siquiera intentó. Frente a Francia estuvo siempre bien marcado y no se entendió bien en que posición iba a jugar: ni como “falso 9” ni más retrasado, pudo desnivelar. Y terminó cerrando un Mundial opaco, deslucido. Muy por debajo de lo que se espera del mejor.

Mas allá de eso, en todo momento se lo vio incómodo, enojado. Para nada se lo vio a gusto, ni con el cuerpo técnico ni con sus compañeros. No disfrutó el Mundial; lo sufrió.

“A Messi yo lo dejaría descansar, que no juegue ni Copa América ni eliminatorias”. Lo dijo uno que sabe y conoce: Mario Kempes. De acuerdo con el Matador: sería lo más lógico después de tanto desgaste inútil. La renovación de la Albiceleste deberá apuntar a caras nuevas (quizás Dybala, Lo Celso, Pavón, Lautaro Martínez podrían encabezar la nueva camada) y Lio podría sumarse más adelante.

Hay algo seguro: un Messi así no le sirve a Argentina. Y una Argentina así no le sirve a Messi.