El siempre espectacular equipo gráfico de BR Football recordó el gol de “chilena” anotado por Zlatan Ibrahimovic a Inglaterra en un “amistoso” disputado en Estocolmo, era el año 2012. Sí, ese que decían que los aztecas, el fin del mundo y bla, bla.
Los suecos tienen una paternidad histórica sobre los ingleses, algo que envidian varios de sus vecinos. Suecia ganó nueve juegos, empató otros nueve y perdió siete contra Inglaterra, y en un amistoso la tregua quedaba para el humo de las rotativas y los periodistas políticamente correctos. Todo el tiempo se desean revanchas entre ambos, y ese 14 de noviembre no sería la excepción.
Suecia empezó ganando con un gol de Zlatan, remontó con un gol de él mismo, y ganó el partido gracias a sus tantos; pero el último con una actuación digna del olimpo.
Ibrahimovic adelantó a los suyos, pero Welbeck y Caulker lo daban vuelta 1-2. Con ese resultado ambos se fueron a los vestuarios, unos muy confiados, y otros muy esperanzados. En el segundo tiempo la remontada tardaría un cacho en llegar, pero cuando se abrió la represa, nada pudo detener el océano que en ella se contenía.
Zlatan anotó en tres ocasiones más, y una de ella, humillando por completo a los ingleses. Una chilena del incombustible delantero al 90+1′ fue el tiro de gracia.
Hart, agrandado por el éxito del City y de rendimientos exagerados por la prensa, no confió en la cobertura de Shawcross y Cahill, así entonces el sobrevalorado guardameta salió, según él, a cortar un balón peligroso con éxito. Sin embargo, no contaba la presencia de Zlatan, quien sin pensárselo dos veces tomó el balón apenas empujado por Hart y ejecutó esa bestial chilena con una potencia de 1000 megatones; la bomba explotó al caer justo dentro del arco inglés. El júbilo sueco se hizo patente en un alocado grito de gol.
“Mål”, le dicen por escrito, pero lo cierto es que a aullido desnudo lo gritan en inglés, y eso fue lo que casi derrumba el techo del Friends Arena de Estocolmo. Una auténtica locura. Un recuerdo imborrable.