VIDEO: Conoce a Riquelmer, subcampeón del torneo FIFA 21 organizado por FESA

Riquelmer y Aarón, de 21 años, ambos originarios de San Miguel, llegaron hasta la final del torneo que se realizó casi en su totalidad en forma virtual, a pesar de tener en contra la débil conectividad de internet en el oriente del país.

Ambos Migueleños fueron parte de los cuatro mejores de entre 600 salvadoreños inscritos en la segunda edición de la Copa FESA E-Sports #JugandoDeLocal, cuya fase final se disputó de forma presencial el pasado 13 de marzo.

Por Miguel Martínez

2021-04-01 6:00:44

Pedro Reyes, de 45 años de edad fue jugador de las bases del Club Deportivo Águila y uno de sus ídolos en ese entonces, era Juan Román Riquelme cuando jugaba como seleccionado de Argentina y el Club Boca Juniors. Por esa razón, decidió nombrar a su hijo haciendo honor a su jugador preferido, Kevin Riquelmer Reyes, de 21 años.

Desde el 6 de marzo, 600 competidores buscaban obtener el premio de un Play Station 5 (PS5), al coronarse campeones del torneo de FIFA 21, que la Fundación Educando a un Salvadoreño (FESA) realizó por segundo año consecutivo. La idea de la iniciativa era promover el esparcimiento de forma segura entre los jóvenes salvadoreños. En el campeonato, se siguieron las medidas de seguridad pertinentes, por lo que la mayor parte se realizó en forma virtual.

La fase de semifinales y final, en la que se premió al primero, segundo y tercer lugar, se llevó a cabo el sábado 13 de marzo, en un hotel capitalino ubicado en la Zona Rosa, de San Salvador. Ese día Riquelmer junto a Aarón Acosta, otro de los participantes, salieron de San Miguel a las 4:30 de la mañana.

El premio que ganó Riquelmer consiste en $150 de la tienda de Play Station. Foto EDH / Jonathan Tobías

El padre de Riquelmer los condujo hasta San Salvador. Riquelmer clasificó a la final venciendo a Obed Henríquez, pero perdió la ventaja de 3-0 que consiguió en el primer partido de la final ante Carlos Álvarez, de 19 años de edad. Álvarez, remontó en el segundo partido y obtuvo el resultado global favorable de 6-7 (FRA vs FRA) y se adjudicó el premio de una consola PS5.

LEE TAMBIÉN: El Salvador bate récord centroamericano en FIFA con la Copa FESA E-sports

“Todos son campeones”, aseguró Pedro al reconocer el talento demostrado por Álvarez en la final. Riquelmer se agenció una tarjeta de $150 para usar en la tienda de Play Station y Obed, quien ganó tercer lugar, una de $100.

Durante el desarrollo del torneo, se vivieron emocionantes encuentros, entre los que destaca el sostenido entre Aarón, quién se adjudicó el cuarto lugar de la competición,  y Roberto Montoya, catalogado dentro de la comunidad de gamers como el mejor en el videojuego FIFA por sus múltiples logros en otros torneos y su constancia durante los últimos tres años.

Carlos Molina es otro reconocido jugador que ha ganado primeros lugares de manera recurrente. De este modo, el mejor jugador cayó ante el novato Aarón por 0-1, obtenido porque Aarón supo aprovechar un mal pase de Montoya al minuto 88 de juego.

En la semifinal pese a la adversidad

Para Aarón, quien se dedica a la venta de ropa, llegar hasta allí no fue fácil. Él no tiene una consola propia ni cuenta de Play Station para jugar en línea. El migueleño debía ir a casa de un amigo y usar su PS4 y usuario para poder vencer en series de dos partidos a 13 rivales antes de la fase de semifinales. Esas semanas, Aarón también estuvo enfocado en el nacimiento de su bebé y asistir a la final de forma presencial le implicó un doble esfuerzo.

Sin embargo, Carlos y Riquelmer, tras haber vivido una emocionante final, reconocen que jugar al FIFA no da seguridad da seguridad de que tu rendimiento sea siempre igual, ya que cada cambio de edición y rachas de buen o mal juego afectan en el desarrollo de los mejores en cada torneo.

Algunos aspectos que dificultan el desarrollo de los deportes electrónicos en El Salvador han sido la lejanía de los servidores y la velocidad y estabilidad de conexión a internet. Estas carencias hace que los jugadores salvadoreños se vean en desventaja ante competidores de la región y otras zonas del mundo. Por ello, es muy difícil que jóvenes talentos en el deporte electrónico se dediquen por más tiempo y aspiren a ser jugadores profesionales que puedan vivir de su pasión.