A dos meses de la conquista de la corona 18 de su historia, Club Deportivo FAS volverá a presentarse hoy ante su público para inaugurar con su trofeo de campeón el torneo Apertura 2021, en una primera fecha que lo pone cara a cara con uno de los últimos semifinalistas, Santa Tecla.
El mismo día arrancan la temporada cuatro de los llamados grandes del fútbol salvadoreño. Los otros tres, Firpo, Águila y el subcampeón Alianza, inician la cruzada por llegar a la final del 19 de diciembre y disputarle el reinado a los tigrillos.
El reverdecido como rey de copas, FAS, le exhibirá a su gente un plantel reforzado en todas sus líneas para encarar su dos grandes frentes de la campaña: lograr el bicampeonato nacional, que se le niega desde de la temporada 2004-05, y superar la barrera de los cuartos de final de la Liga Concacaf, a los que llegó por última vez en 2018.
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Este plantel del técnico Jorge el Zarco Rodríguez parece listo para emprender una nueva era de dominio en el fútbol nacional. Una que pretende reñir con la época que forjó el Alianza en los últimos cuatro años y cuya vigencia está en cuestión tras la derrota alba ante los santanecos en la final del pasado 30 de mayo.
Contrario a su gran competidor, los paquidermos no hay retocado mucho su equipo para recuperar el cetro. El primer examen es en casa ante el nuevo Municipal Limeño de Bruno Martínez, el mexicano que afronta su tercer torneo en el país y quien buscaría darle una nueva identidad futbolística al equipo oriental.
Otro que apela a un cambio es Club Deportivo Águila, otrora subcampeón en la primera mitad de este año que ha confiado en el argentino Cristian Domizi para adaptar su anterior trabajo en Atlético Marte a su dirección técnica. Su primera prueba será dura, ante el 11 Deportivo de Carlos Romero, técnico con sello único y el último en lograr darle un título a los emplumados.
La continuidad es la apuesta de Luis Ángel Firpo, que mantiene en la jefatura de su proyecto a Roberto Gamarra y cuyo primer escollo es el Jocoro, la incógnita del torneo tras una reestructuración grande en su plantel a las órdenes del uruguayo Pablo Quiñones.