En El Salvador, que un equipo profesional no cancele salarios ya no sorprende a nadie. Sin embargo, llama la atención cuando por común acuerdo, los jugadores deciden no recibir pago, correr por sus propios gastos y hacerle frente al torneo. Este es el caso del Real San Esteban, equipo de San Vicente, que milita en la Tercera División del fútbol profesional.
Según contó Raúl Escoto, secretario del equipo vicentino, por problemas económicos el equipo estuvo a punto de desaparecer: “pensamos en prestar la categoría, cederla, pero no venderla, porque es un patrimonio del pueblo. El dinero al final se acaba y del equipo después no queda nada”, expresó.
Contó que con un grupo de amigos decidieron hacerle frente al equipo e inscribirlo en la Liga de bronce, llegando a un acuerdo con los jugadores: “con mucho sacrificio iniciamos los entenos y hablamos con los jugadores que era imposible darles un salario. Aquí se les acostumbraba a pagar $10, $15 y hasta $35 por partido a un jugador que había rodado en alguna categoría. Pero estos jugadores decidieron hacerle frente sin salario”, señaló.
Escoto añadió: “Gracias a Dios tenemos buenos elementos, que se entregan de corazón cada domingo y es así como nos motivamos. No les falta alimentación, ni transporte. Ellos gastan de su bolsa para movilizarse. Algunos tienen motocicleta, otros lo hacen en autobús y así todos estamos haciendo un sacrificio para estar en la Tercera División”.
El entrenador principal es alguien residente de San Sebastián, Hugo Rivas, y le colabora Hector Carrillo, actual portero del Atlético Marte, quien “acompaña al equipo cuando no tiene actividad en la Primera. Del otro lado de la malla ciclón está dando indicaciones”, contó Escoto.
El directivo explicó, “ellos tampoco reciben salario. Es más, de su bolsillo sacan para colaborar con el equipo ya sea para transporte o refrigerio”.
Algunos patrocinadores aportan a la institución, así como también gente que ayudan de extranjero, más lo que recogen de taquilla en los partidos que juegan como local. Los gastos, por partido son de “cuando somos locales: $143, en pago de arbitraje; $14, en pintura para la cancha; y $20 de refrigerio. Mientras que de visita, depende del lugar se paga de $75 a $150 de transporte y $60 de alimentación”, apunta.
Los directivos hacen el llamado para quienes quieren colaborar con ellos, ya sea con pelota, calzados para los jugadores o guantes para el portero. Para ello están a disposición la cuenta oficial en Facebook, Real San Esteban o también directamente con Ramón Escoto (7559-4344).
Aunque el acuerdo es jugar sin pagar salarios, los directivos hacen el esfuerzo para remunerar de alguna forma al plantel, para que ellos no pierdan la motivación y convertirse en uno de los grandes protagonistas en esta categoría, como lo han sido en los últimos torneos. “No solo queremos competir por competir, nuestro objetivo es ser campeones de la Tercera División”, cerró Escoto.