Aunque como siempre el club había preparado un mosaico que cubría todo el Camp Nou con los colores azul y grana en ambos goles y los de la ‘senyera’ en el lateral y en la zona de tribuna, un segundo mosaico, el de ‘Spain sit and talk’, fue también protagonista al inicio del Clásico entre el Barcelona y Real Madrid.
Justo antes de que empezase el partido y, después de que sonara por megafonía el himno del Barça y luciera el mosaico habitual, una gran cantidad de aficionados desplegaron otro, con cartulinas azules del tamaño de una bufanda, mientras gritaban ‘Spain sit and talk’ (España, siéntate y habla), justo en el arranque de partido.
Tras esa petición en inglés, llegaron los primeros gritos de “¡independencia!”, la primera acción de protesta, dentro del estadio, de las que han preparado la plataforma independentista Tsunami Democràtic para el Clásico de este miércoles.
Miles de elementos de la policía y guardias de seguridad privada se desplegaron el miércoles dentro y en los alrededores del Camp Nou de Barcelona para garantizar que una protesta del movimiento separatista catalán no alterara la realización de uno de los partidos de fútbol más seguidos a nivel mundial.
El Barcelona, líder de la Liga española, recibe a su archirrival y segundo de la tabla Real Madrid, y los separatistas aprovecharon la cobertura global de los medios para exigir la independencia catalana de España.
El llamado clásico había sido pospuesto el 26 de octubre ante los temores de que los independentistas _en ese entonces en medio de una oleada de protestas violentas_ trataran de interrumpirlo.
?? Nuestro @angelponstv te cuenta desde los alrededores del Camp Nou la última hora sobre #ElClasico #EDirecto pic.twitter.com/eWDlDxCE5t
— España Directo (@EDirectoTVE) December 18, 2019
Barcelona es la capital de Cataluña, una adinerada región del noreste del país. El gobierno español se opone a la separación argumentando que eso violaría su Constitución.
Los organizadores de la protesta señalaron que cerca de 25,000 personas se apuntaron en el llamado a congregarse cerca del Camp Nou y tratarían de ingresar al estadio.
Se espera que aproximadamente 100,000 aficionados acudan al encuentro en el estadio más grande de Europa, y más de 3,000 policías y guardias de seguridad fueron asignados en el lugar.
El grupo separatista en línea Tsunami Democrático, que se encuentra detrás de la protesta, publicó un mensaje a través de las redes sociales en que anunciaba las manifestaciones.