Platense vuelve a coquetear con la Primera División, al imponerse en penales (5-4) a Destroyer, con el que se consagró campeón del Apertura 2020 de la Segunda División, que les da medio boleto para buscar el ascenso a la Liga Mayor
En este partido, los portuarios y galleros demostraron porque fueron los mejores equipos de la Liga y porque también son grandes candidatos para estar en la Liga de privilegio.
El encuentro fue entretenido, con mucha entrega y coraje para pelear la pelota, de ida y vuelta en el ataque y con dos aficiones muy metidas en lo que pasaba en la cancha, reaccionando ante cualquier jugada con mucha emoción.
Del estadio fueron habilitados los sectores norte y sur de sol preferente, sombra y tribuna. Además de platea. Los galleros casi llenaron su sector. Mientras que los portuarios tuvieron mejor asistencia en tribuna.
Fueron dos planteamientos parecidos, con un 4-4-2, pasando mucho tiempo la pelota en el centro, para abrir el juego y perfilarse sobre la meta rival. Pero, en los primeros instantes reinó el nerviosismo y la ansiedad.
Los primeros diez minutos fueron completamente del Destroyer, quienes durante este periodo Jefferson Viveros oestrelló un cabezazo en el poste (5’) y el portero gallero Jonathan Valle tuvo dos buenos achiques.
Platense no había llegado, pero fue contundente en su primera aproximación, en un tiro de esquina que convirtió el colombiano Wilbert Arizala, con un rebote que bañó al portero Gerson López (15’).
Así, los de Zacatecoluca ganaron confianza y emparejaron la dinámica del juego. Siendo estos, también, los que pasaron a tener mejores llegadas, una de ellas rematando en el poste (36’).
Destroyer, quien utilizó mucho la banda derecha para hacer daño, terminó encontrando la que necesitaba para lograr la paridad, con un pase en profundidad que Jonathan Nolasco definió con un toque raso y por debajo del portero (39’).
Platense de Zacatecoluca se solidariza con sus futbolistas
Un nuevo inicio
Entre la alegría de los portuarios y el lamento de los viroleños, con el empate el encuentro mantuvo la buena dinámica, pero se llegó el final de la primera parte, que las dos aficiones despidieron con aplausos.
Ambos planteles recibieron la charla técnica en los graderíos hacia el camerino y con lo que se alcanzó a ver, los dos entrenadores eran enérgicos con sus observaciones.
Como en la primera parte, Destroyer saltó al campo más convencido, mientras a Platense regresó el nerviosismo y se notó un descontrol en el medio campo, en el manejo de la pelota.
Los colombianos Viveros y Nolasco tuvieron dos oportunidades muy claras, pero les faltó más precisión para definir las jugadas.
Estas llegaron a pasar, cuando Platense despertó y comenzó a complicar con las jugadas por las bandas, de donde salió la ocasión para convertir el segundo, con un centro de Melgar que empujó el colombiano Delgado (70’).
La ventaja no le duró mucho a los viroleños, pues cuatro minutos después, logró la paridad, con una jugada dudosa, donde tras un rebote llegó la pelota a Viveros, quien remató casi sobre la línea de gol (74’).
Resultado con el que se fueron hasta el final de los noventa minutos y con ello yéndose a los 30 minutos de tiempo extra, etapa en la que se bajaron las revoluciones, los jugadores que entraron de cambio hicieron la diferencia, pero el resultado no cambio, llevando la definición hasta el drama de los penales.
Los porteros se convirtieron en protagonistas. Figura fue el gallero Jonathan Valle, quien tapó dos penales. Abonado a las definiciones de Delgado, Arizala, Ruiz, Aguilar y Brayan Martínez, con el que se coronaron 5-4.