Néstor Raúl Renderos López, conocido como “Perro” en el ambiente futbolístico nacional por su forma de marcar y por su determinación en la cancha, se ha vuelto uno de los jugadores más representativos de C.D FAS en los últimos años.
Después de 16 torneos en el equipo con más títulos de El Salvador, de cuatro finales disputadas y de buenos y malos momentos, Renderos no se ve vistiendo el uniforme de otro equipo. “Yo aquí en El Salvador no me veo en otro equipo que no sea FAS”, dijo convencido el capitán tigrillo, originario de San Salvador.
El sentido mensaje del capitán de FAS para la afición tigrilla
Néstor Raúl Renderos habló de lo que pasó en los cuartos de final del torneo pasado y lo que esperan para el campeonato que arranca este domingo
Renderos se siente feliz en el conjunto santaneco, a gusto con sus compañeros y con el increíble ambiente que hay al interior de la institución. “Tenemos un camerino bastante sano, lo que más me gusta es que tenemos mucha identidad con el equipo, desde la gente de lavandería, el jardinero, los utileros; todos respiramos FAS. Tenemos un buen grupo”, agregó.
Renderos, más allá de portar los colores tigrillos, se siente muy identificado con la Ciudad Morena y se considera un hincha de corazón, un fasista más. “Quiero lo mejor para FAS y espero que a futuro venga todo lo bueno para el equipo”, confió.
“Santa Ana es una ciudad especial, el calor de su gente es increíble y la pasión que se vive ahí por el equipo es impresionante; no soy de Santa Ana, pero viajo todos los días allá y la siento mi casa”, manifestó.
Sobre el liderazgo que muestra en la cancha, comentó que es un compromiso y que se siente feliz de representar a todo un grupo de futbolistas que se entrega en cada juego para darle alegrías a los aficionados. “Es un orgullo poder ser el capitán de este equipo, del más grande del país, y espero seguir ejerciendo mi rol con disciplina, que es lo que siempre he tratado de hacer”, mencionó.
“Quiero ser campeón con FAS”
Sin embargo, su paso por FAS ha tenido momentos de frustración y tristezas. Por ejemplo, no ha podido levantar un título con el equipo de sus amores, que es uno de su más grandes anhelos de su vida profesional y personal. Pero, a pesar de los constantes fracasos en la búsqueda de la corona, el sueño de obtenerla sigue intacto y afirma que como equipo no dejarán de luchar por alcanzar el objetivo, el cual no logran desde hace casi nueve años.
“En este tiempo he tenido buenas ofertas de afuera, pero no me he querido ir porque quiero ser campeón con FAS. Tengo esa espinita, no he podido lograrlo y espero hacerlo”, mencionó.