Rubén “Polillita” Da Silva, quien suena para ser nuevo entrenador de Santa Tecla (de nuevo) fue un fantástico delantero en Uruguay y Argentina, esencialmente; jugó también en España, México e Italia pero con menos impacto.
Hoy recordamos en CANCHA unas postales del “Polillita” hechas por El Gráfico, claro, el de Argentina, el histórico; también añadimos una de Ovación de Uruguay. Pues bien, Rubén Da Silva, nacido profesionalmente en Danubio, jugó a finales de los años ochenta ni más ni menos que en River Plate de Argentina.
Ahí en el “Millo” hubo mucha expectativa con su fichaje, pero tras dos temporadas y media, con intervalos en Logroñés y Cremonese, el uruguayo decidió cambiar de aires y marcharse de Núñez rumbo ¡al Barrio La Boca! ¡Vaya cambio tan radical!
Pero antes, hay que decir que Da Silva en “El Millonario” jugó a la par de tremendos figurones como ¡Ernesto “Carucha” Corti” entrenador actual de Club Deportivo Águila, Gerardo “La Vieja Reinoso” con paso como DT por Luis Ángel Firpo, Gabriel Omar Batistuta, Sergio “Checho” Batista, Jorge Higuaín (padre de Gonzalo y Federico) y Ángel David Comizzo, DT en Universitario de Perú ¡qué leyendas!
En Boca estuvo menos tiempo que en River Plate pero llegó a rodearse de personajes con gran poder mediático y de mucho talento como “Mono” Navarro Montoya, Carlos “Colorado” Mac Allister, Nelson “Hulk” Vivas, Sergio “Manteca” Martínez, Georgi Kinkladze, Alejandro Mancuso (quien viniera en el showbol entre “Mágico” y Maradona) entre otros xeneizes.
Pero Rubén Da Silva recaló después en Rosario Central después de vestir las camisetas de los dos colosos bonaersenses. Ahí en el “Canalla” el “Polillita” la recontradescosió y fue ídolo brutal. Hasta hoy en día le recuerdan con muchísimo cariño.
El exariete charrúa rompió una y otra vez las mallas de las metas en el “Gigante de Arroyito”, los porteros le sufrían en demasía torneo a torneo. A Rubén Da Silva le tienen una estima infinita en la ciudad que vio nacer a Messi pero quienes a su vez aman a Aldo Pedro Poy, “Patón” Bauza entre otras bestias.
En Rosario Central compartió camarín con gente como “El Gato” Sessa, “El Tati” José Buljubasich, Germán Rivarola, Eduardo “Chacho” Coudet, Ezequiel González, Walter “Divino” Gaitán, “Pato” Abondanzieri, Roberto “Tito” Bonano y Cristian “Kily” González, por mencionar a algunos.
También jugó más tarde en Nacional de Montevideo donde se juntó con gente como Milton “Tyson” Núñez, Richard “El Chengue” Morales, de nuevo “Manteca” Martínez, Sebastián “El Loco” Abreu, Limberg Gutiérrez, Pierre Webó, Diego Lugano, Rubén Sosa, “La Hiena” Regueiro y Gustavo Varela.
Rubén Da Silva, campeón de la Copa América 1995, jugó en la Selección Nacional de Uruguay con grandes referentes como Daniel Fonseca, Diego López, Enzo “Príncipe” Francescoli, Gustavo Poyet, Pablo Bengoechea, Rubén “Pato” Sosa y un gran socio como “Manteca” Martínez. Las camisetas que debe tener el “Polillita” en su armario…
El profe Da Silva sin duda disfrutó del fútbol rodeándose de una barbaridad de talentos en cancha. La cantidad animal de personajes, ídolos, héroes, caciques, caudillos… “Polillita” formó parte de grandes clubes, pero también como dice el “Maestro” Tabárez de grandes “grupos humanos”.
Nunca confundás, “Polillita” es el “Polillita”, si le haces más grande el mote como decirle “Polilla” porque no te gustan los diminutivos, estás nombrando al hermano, Jorge, quien jugara en algún momento junto al “Mágico” González en Valladolid. Decile siempre “Polillita”.
Uno de los pocos futbolistas en activo quien jugó con “Polillita” es Walter Gargano, quien aún lo intenta en Peñarol de Montevideo; el cuñado de Marek Hamsik compartió con Da Silva en su ocaso profesional defendiendo la camiseta de Danubio.