Se busca socio para Messi en Argentina y una idea de juego

Quizás desde que Di María y Agüero no estuviesen al mejor nivel con Argentina, Messi lo reciente, y es algo permanente ya con o sin ellos

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Messi celebra luego de anotar de penal ante Ecuador. Foto EDH/EFE

Por Robbie Ruud | EFE

2020-10-10 9:09:12

Argentina es lo que es y anda siempre con lo puesto, que no es otra cosa que el superdotado Lionel Messi rodeado de 10 voluntades con la ambición de llegar al Mundial de Catar-2022.

Al arrancar este jueves la clasificatoria sudamericana con un pálido triunfo 1-0 ante Ecuador en Buenos Aires, se volvió a ver la historia de siempre con la Albiceleste: ¿a qué juega?

Excusas para lo visto en el debut hay a granel. Hace casi un año que el equipo no se reunía. El covid-19 es una pesadilla que tiene en jaque al mundo. Hay lesionados, contagiados y excluidos.

La reflexión que hizo el capitán y goleador histórico está a la altura de la madurez de sus 33 años: “Es un año complicado y lo que intentamos fue darle una alegría a la gente, en una situación difícil, y más allá del juego, que no fue el que queríamos”.

Más sensato imposible. Al cabo, Messi no es un crítico, es el líder. Una vez más, como en los últimos 4 mundiales, no le ha esquivado el bulto a ese sueño que parece utopía. Quiere ganar la Copa del Mundo antes del retiro.

¿Puede hacerlo jugando así la Albiceleste?

En los primeros minutos el ídolo encendió la máquina a todo trapo. Combinó pases con Leandro Paredes, Lautaro Martínez y Lucas Ocampos.

En las tribunas de una Bombonera triste y vacía de pasión futbolera, el viento agitaba banderas de aliento y se oían grabaciones de hinchas cantando a coro “Olé, Olé, Messi, Messi”. Patético, pero acorde a los tiempos de pandemia.

Clavó el penal a los 13 minutos de iniciado el partido y al ratito se aburrió. Apenas aparecía por ráfagas, lejos del arco.

El DT Lionel Scaloni, exitoso al menos en armar una ‘Joven Guardia’ albiceleste, le encontró una explicación: “En la semana perdimos (por lesión) a un jugador que consideramos clave por la izquierda, como Giovani Lo Celso”.

“Hubo solidez, sacrificio y que no te hagan un gol es importante. El balance es que se ganó”, justificó Scaloni, sin que le falte algo de razón.

En la convocatoria dejó afuera a un amigo de Messi dentro y fuera de la cancha, Ángel ‘Fideo’ Di María, pese a que estuvo haciendo maravillas en el PSG francés. Otro compadre del rosarino, Sergio ‘Kun’ Agüero, está lesionado.

Messi no parece incómodo con la nueva camada, que tiene frescura y atrevimiento. ¿Entonces, qué?

El diario deportivo Olé ensayó una explicación: “La Selección dejó una mejor imagen sin la pelota que con ella. El doble cinco Rodrigo De Paul-Paredes, parado a la misma altura, más la ausencia de alguien que rompiera al espacio, hizo que escasearan líneas de pases y elaboración”.

Messi quedaba como el hombre más adelantado de Argentina y Lautaro retrocedía para presionar al volante central ecuatoriano. Marcos Acuña y Ocampos se cerraban”, analizó el diario.

¡Justo lo que Scaloni dijo que no debía pasar! En declaraciones previas había planteado que Messi debe tener adelante a dos hombres para “darles pases profundos, no al pie”. Así no hay esquema que aguante.

Ahora enfrenta ante Bolivia el martes uno de los traumas de los argentinos: los 3.600 metros de la altura de La Paz.