En el más reciente inconveniente sobre racismo y xenofobia en el fútbol de Rusia, el centrocampista brasileño del Palmeiras, Felipe Melo, pidió jugar un partido amistoso con el delantero ruso Pável Pogrebniak, quien rechazó la presencia de jugadores de color y de brasileños nacionalizados en la selección de Rusia.
“Traedle aquí para jugar un amistoso”, respondió en sus redes sociales Melo, quien fue internacional con la Canarinha, a una publicación de un periodista que se hizo eco de las declaraciones de corte racista y xenófobo de Pogrebniak.
Trazer ele pra jogar um amistoso aqui!
— Felipe Melo (@_felipemelo_) 19 de marzo de 2019
El ariete ruso refutó, en una entrevista con el diario “Sport Express”, que un “futbolista de color” como el atacante Ari, brasileño naturalizado ruso que juega en el Krasnodar, sea convocado con el combinado nacional. “Es ridículo que un futbolista de color juegue en la selección rusa”, afirmó Pogrebniak, para preguntarse después “para qué Ari recibió pasaporte ruso”.
Asimismo, el exjugador de Zenit y Stuttgart, entre otros clubes, también criticó la presencia en la selección rusa del brasileño nacionalizado Mario Fernandes, lateral derecho que jugó el pasado Mundial de Rusia destacándose como uno de los mejores del cuadro anfitrión. “En esa posición tenemos también a Ígor Smólnikov. Podíamos haber seguido sin extranjeros”, comentó.
Por su parte, Ari manifestó el lunes en una entrevista con “ESPN” que un “tipo como ese no merece atención” y que su idea es “continuar defendiendo” la camiseta de la selección rusa. “Muchos hablaran que este tipo (Pogrebniak) es un imbécil por dar una entrevista hablando esas cosas. La propia federación (rusa) debe multarlo”, dijo.