A inicios de febrero de este año, se acusó al Barcelona presidido por José María Bartomeu de contratar a una empresa que se encargaba de desprestigiar a todos sus detractores, a través de las redes sociales. La forma en la que pagaban a estas empresas fue la que dio pie a las autoridades a una investigación que encontró otras irregularidades.
El ‘Barçagate’, como se le denominó a este sonado caso, vuelve a presentar más evidencias de las partes involucradas cuando la junta directiva de Bartomeu está en plenas negociaciones con los representantes de Messi para que dé marcha atrás en su decisión de dejar al club cuanto antes.
Los Mossos d’Esquadra, que es la policía autonómica de Cataluña, ente encargado de la investigación, presentó en mayo pasado toda la información para que fuera el juzgado 13 de Barcelona el que saque conclusiones.
VIDEO: El gesto de humildad de Ari, el delantero brasileño, que conmueve en Instagram“Según estos datos, han determinado que se cometieron delitos económicos constitutivos de corrupción. En este primer informe, sostienen que el club blaugrana bajo la decisión de Bartomeu, realizó irregularidades financieras serias, como sobreprecios del 600%, burlar el órgano de control o articular despidos ficticios para esquivar el coste de las indemnizaciones y demás compromisos con la Seguridad Social”, dice el despacho del sitio web 20minutos.es de España.
Lo que ahora deben indagar las autoridades de Cataluña es si estos actos estaban destinados al enriquecimiento ilícito de José María Bartomeu o de los otros socios que están en su junta directiva.
“Por el camino salieron varios directivos, comenzando por Emili Rousaud, que pasó de ser el posible delfín de Bartomeu a uno de sus grandes enemigos, o la exresponsable del fútbol femenino, Maria Teixidor, que acaba de estrenar su cargo como presidenta del Circuit de Barcelona-Catalunya. Ambos, especialmente Rousaud, ha acusado públicamente de corrupción a la Junta de Bartomeu”, dice el mismo medio ibérico.
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