FAS ya no está jugando con fuego, se está quemando. Sigue perdiendo y casi ni mete las manos, como anoche, cuando Sonsonate lo hundió con dos goles tempraneros y lo agarró de chivo expiatorio para quitarse la mufa de 14 partidos sin ganar como local en Primera División.
Aunque a partir de aquí, puede esperarse cualquier cosa en del equipo asociado, pero sobre todo que prime la cordura en su entorno.
Y si el técnico Jorge Rodríguez fue el gran señalado en la última derrota en casa, ahora las explicaciones tendrán que venir de un plantel que ayer no tuvo eficacia ante el equipo que llegaba con la delantera más flojo del campeonato.
Ya da lo mismo en qué grupo de la segunda fase caiga FAS (igual, pinta para sotanero y para compartir grupo con los tres líderes de zona). La realidad del equipo no corresponde en este momento a su historia, al peso específico de su plantilla y a su inversión financiera.
Cabe decir que el primer gol tiene beneficio de duda para FAS. No parecía falta en el área de Xavi García sobre Jacobo Moreno, al 5’, pero sí para el árbitro Castillo Toruño y de este modo el colombiano Víctor Landazuri pudo marcar de penal su primer gol en el fútbol salvadoreño.
Al 27’, mientras FAS insistía por el empate, Carlos Herrera recibió balón para desbordar por izquierda, dribló al portero Carabantes y remató a puerta casi vacía el 2-0.
Para colmo, una lesión en el hombro obligó a abandonar a Tomás Granitto (40’) en el primer tiempo, pero resultó positivo porque entró por él Dustin Corea, quien al 60’ introdujo un rebote que concedió el meta Ramírez, tras una contra rápida por derecha, y logró descontar.
Con los minutos y los cambios, FAS mejoró y rozó el 2-2. Incluso se le anuló un gol por offside y hubo una posible falta de penalti del portero sobre Luis Peralta, pero nada de eso se cristalizó para salvar la papeleta.
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ALEGRÍA EN LAS DELICIAS
Volvió la alegría para Santa Tecla, en casa, después de la derrota del fin de semana. Anoche, el equipo periquito venció a Atlético Marte (1-0), y no bajó su perfil de escolta del puntero del grupo centro (segundo, nueve puntos); y los carabineros siguen últimos (con uno).
Tecla tomó la iniciativa. Era el obligado a reencontrarse con el triunfo, no solo para mantenerse arriba, sino porque en papeles era candidato a solventar la victoria ante unos marcianos que no despegan en el Clausura.
Los tecleños contaron con algunas oportunidades ofensivas, pero no lograron concretarlas. Dos fueron de Eduardo Rodríguez: una, en posición prohibida; y otra, con un toque a puerta que se estrelló en el travesaño.
La ofensiva perica no encontraba el último toque, a pesar de su posesión de balón. Pero, de a poco, las llegadas tecleñas dieron fruto. Al minuto 42, César Flores se encargó de quebrar el arco marciano, para definir el 1-0.
Estaba cuesta arriba el equipo capitalino. Y, como en todo el torneo, le tocó remar contra corriente, en busca de intentar rescatar el partido. Pero fue complicado, porque los colineros se mantuvieron atacando, creando, buscando el segundo. Estuvieron cerca, pero uno fue suficiente para que Tecla volviera al triunfo.
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