El Juventus Turín se clasificó este viernes, en el regreso del fútbol italiano tras más de tres meses de parón a causa del coronavirus, para la final de la Copa Italia, al empatar 0-0 en el Allianz Stadium turinés y al hacer bueno el 1-1 conseguido en la ida, disputado a mediados de febrero en San Siro.
El balompié regresó a Italia sin goles, pero con un partido intenso, en el que el portugués Cristiano Ronaldo falló un penalti en la primera mitad y en el que el Milan aguantó con coraje hasta el final, pese a quedarse con diez hombres tras apenas quince minutos, sin poder evitar que el Juventus se clasificara para la final del próximo 17 de junio en el Olímpico de Roma.
Su rival se conocerá este sábado, cuando el Nápoles y el Inter de Milán se midan en el San Paolo, después de que la ida acabara con victoria del cuadro napolitano por 1-0.
Tras 95 días de inactividad a causa del coronavirus, el fútbol italiano regresó con un partido decisivo, una semifinal copera disputada en un Allianz Stadium turinés desierto y precedida por un intenso minuto de silencio en honor a las más de 34,000 víctimas italianas de la pandemia.
Los dos equipos se colocaron en el centro del campo junto al equipo arbitral y a tres miembros del cuerpo sanitario italiano y, con las luces del estadio apagadas, se unieron en un sentido minuto de reflexión.