Cristiano Ronaldo no llevaba la equipación lusa desde el Mundial y la nostalgia por verle era tal que los flashes se alzaron como un tsunami cuando pisó el césped para entrenar con las “quinas”; el astro del Juventus ha regresado por fin al lugar en el que más que admirado, es venerado.
Su categoría de ídolo no se siente en ninguna parte tanto como en su país, donde en muchos bares los fines de semana se ven en pantallas conjuntas al mismo tiempo los encuentros de la “vecchia signora” y los de la Liga portuguesa. Hoy el delantero ha regresado a Oeiras, a las afueras de Lisboa, para incorporarse a su selección, que prepara los encuentros clasificatorios para la Eurocopa 2020 que disputará en Lisboa los días 22 y 25 de marzo contra Ucrania y Serbia.
Buena parte de sus compañeros están concentrados en Oeiras desde este lunes, pero la expectación se reservaba para hoy, como ha quedado demostrado en la rueda de prensa previa al entrenamiento abierto a la prensa, en la que ha comparecido João Cancelo para inicialmente hablar del estado de las “quinas”.