Ni de un lado ni del otro. Ni Chelsea ni Monaco lo confirmaron todavía de manera oficial. Sin embargo, los ojos emocionados de Cesc Fábregas parecen decir más que ambas instituciones.
Son los globos oculares vidriosos, los del adiós. En Stamford Bridge, en la victoria del equipo de Maurizio Sarri contra el Nottingham Forest de Aitor Karanka por 2-0 por la FA Cup, el ibérico dio a entender que vivió su último partido con los “blues”.
El ex-Barcelona entró en el onceno y llevó la cinta de capitán. A los 85 minutos, cuando fue sustituido por N’Golo Kanté, aparecieron algunas lágrimas, llegaron rápido los abrazos de sus compañeros, de su entrenador y los mismos aficionados le regalaron una de las más grandes ovaciones.
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Fue como un secreto a voces: no hay confirmaciones, pero se sabe que jugará este semestre en la liga francesa.
Fabregas dejará Chelsea luego de 198 partidos, 22 goles, 55 asistencias y cuatro títulos. Se entiende así la melancolía que ya comienza a ser protagonista.
500 games in English football, the best and most competitive football in the world, what a ride it has been! A proper dream come true to reach these numbers. Another proud moment in my career. I will see you all at the Bridge on Saturday. @arsenal @chelseafc #cesc500 pic.twitter.com/LN2DSb9CIC
— Cesc Fàbregas Soler (@cesc4official) 2 de enero de 2019