Al tomar el diccionario y buscar el significado de “caradura”, aparece: “Alguien que actúa con desvergüenza, descaro o falta de respeto”. El adjetivo calza en la figura de Hugo Carrillo, miembro del Comité Ejecutivo 2014-2018 que está por terminar su gestión, una gestión desastrosa en muchísimos niveles.
A pesar de su mal trabajo, Carrillo decidió ir por la reelección y, a través de un apoyo en Segunda División que nadie veía venir, estará en el próximo comité 2018-2022. Encima, además, quiere ser presidente.
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Si revisamos lo hecho por Carrillo en el fútbol, no se comprende cómo intenta reelegirse. Ha sido una camándula de errores. Valga aclarar que no es todo culpa suya, pues el Comité Ejecutivo de la Fesfut es un ente colegiado de siete miembros; pero el hombre frente a las cámaras y quien ha tomado las decisiones de peso en la gestión federativa ha sido Carrillo.
Aquí, algunos de sus fallos.
1. Dos descensos con Marte
¿Cómo confiar en la administración deportiva de un dirigente que no pudo sostener en Primera a su equipo, no una vez, sino dos veces? Con Carrillo de presidente, los bombarderos descendieron a Segunda en dos ocasiones. Bajó en 2014-2015. Después, Carrillo compró un puesto en Primera cuando la Liga Mayor se amplió a 12 equipos. Pagó $100 mil, regresaron a Primera… y el equipo volvió a bajar en 2015-16. Fue la trituradora de varios DT, pues en el banquillo marciano pasaron “Cacho” Meléndez, Douglas Vidal Jiménez, Juan Sarulyte y Efraín “Chirolón” Burgos.
El Jugador de Atlético Marte, Edwin Sánchez, lamenta la derrota que los deja fuera de la Primera División.
2. No les pagó a sus jugadores al descender
Cuando Marte bajó en 2016, Carrillo les hizo firmar a los jugadores un documento para liberar al equipo de la responsabilidad de pagarles salarios pendientes y, sólo así, los futbolistas pudieron recibir su finiquito para irse a otro club. Esta acción fue expuesta por los mismos jugadores. El exgerente de Marte, Romeo Blanco, dijo que “los jugadores firmaron un documento por rendimiento. Si no salvan la categoría no van a cobrar”; y así fue.
3. Un despido público
En medio de la presión por no bajar, hubo un episodio feo en febrero de 2016. Marte perdió con UES en el “Mágico” y Carrillo, presente en las gradas, decidió anunciarle primero a los medios que iba a quitar al técnico Douglas Vidal Jiménez… y después bajó a la cancha a despedirlo frente a las cámaras.
4. Fracasos deportivos
Carrillo integra un Comité Ejecutivo perdedor. Bajo su gestión, el único título que pudo celebrar el país fue la Copa Centroamericana de Fútbol Playa, en marzo 2018; sin embargo, la Selecta Playera falló en ir a los dos últimos mundiales en esta administración (2015 y 2017). No hubo alegrías deportivas en ningún otro nivel.
Cero clasificaciones a Copas del Mundo en categoría alguna (Sub-17, Sub-20, mucho menos la Mayor ni en femenino, tampoco en fútbol sala). La Sub-21 logró el boleto a los Juegos C.A. y del Caribe de Barranquilla 2018, pero la Fesfut no le ha dado la preparación internacional adecuada. Salvo una hazaña de estos jóvenes, van rumbo a otro fracaso.
El caso de esta Sub 21 fue un fallo repetido en otras selecciones juveniles, que llegaron con escasa preparación a las eliminatorias regionales.
“¿Renunciar a FESFUT? No estamos haciendo mala gestión”
Así lo consideró uno de los miembros del Comité Ejecutivo de la Fesfut. Además confirmó que habrán pérdidas económicas por el juego ante Canadá
5. Sin patrocinios
Aún cuando en 2014 tuvo el apoyo de varios empresarios que integraron el Proyecto Azul y Blanco, y si bien esto trajo en un inicio que marcas importantes se acercaran, el mal trabajo de la Fesfut comenzó a minar esta confianza, hasta que se alejaron los patrocinios. Es una fórmula sencilla: ninguna empresa quiere ver relacionada su marca con tan mala gestión. ¿Cómo va a cambiar este panorama hacia 2022, si Carrillo continúa ahí? En cambio, las vecinas Honduras y Costa Rica, para no ir más lejos, sí tienen empresas que confían en sus federativos.
6. Mala relación con los jugadores
No hay buen “feeling” entre la Fesfut y los seleccionados. Desde 2014, con Roca al frente, hubo fuertes reclamos de los futbolistas, que pidieron condiciones básicas (mejor alimentación, hoteles, viáticos, etc.). Esto provocó, por ejemplo, que ante México viajara una Selecta B en noviembre de 2015 y, con “el Primi” a cargo, caímos 3-0 ante los aztecas. Primer paso hacia quedar fuera del camino a Rusia 2018. Después, cuando la Federación adujo falta de dinero para que no siguiera Eduardo Lara, muchos pesos pesados de la Selecta criticaron dura y públicamente al Comité, Carrillo incluido. Los trataron de “ineptos” y más. Rodolfo Zelaya, Nelson Bonilla, Darwin Cerén, Gerson Mayén, Álex Larín, Benji Villalobos, Kevin Santamaría… un clamor.
Nelson Bonilla en entrevista con El Diario de Hoy
7. Críticas de técnicos salientes
Todos los entrenadores que pasaron por la Mayor en este tiempo se fueron con dardos hacia Carrillo y la Fesfut. Más diplomáticos algunos, menos elegantes otros, pero todos coincidieron en reprobar a esta Fesfut. Pasó con el español Albert Roca; luego con “Zarco” Rodríguez, quien llegó de “bombero” para dos juegos ante Curazao, y aunque luego estuvo a punto de dirigir el amistoso de este 2 de junio contra Honduras, dio un paso al costado al conocer que Carrillo seguirá en la federación. El hondureño Ramón “Primitivo” Maradiaga y el colombiano Eduardo Lara también lamentaron la deplorable gestión de la Fesfut; a ambos llegaron a deberles hasta tres meses de salarios.
8. Lucha con la Primera
Hay una guerra abierta entre dirigentes de la Liga Mayor y el actual Comité Ejecutivo. Desde la Primera, personas como Lisandro Pohl, Ernesto Allwood, Guillermo Morán, José Vidal Hernández y José García Ferreiro, entre otros, han sido directos en sus críticas a Carrillo. Consideran que ha habido actos arbitrarios por parte de la Fesfut, que han poblado a organismos auxiliares con personas cercanas a los intereses de Carrillo y compañía, y descripciones como “incapaz” o “inepto” están a la orden del día. Toda esta reyerta ha concluido en el castigo a buena parte de estos y otros dirigentes de Primera, lo que les ha inhabilitado para integrar el Comité 18-22. Ha habido luchas por llamar congresos extraordinarios para generar cambios; y la Primera intentó desligarse de la Fesfut y ser autónoma, sin éxito.
9. Finanzas millonarias bajo la lupa
Cuando Carrillo y compañía presentaron los balances financieros de la federación en diciembre de 2017, los delegados de la asamblea del fútbol no los aprobaron, porque habían importantes señalamientos e irregularidades. Entre ellos, la Fesfut presentaba como propios los fondos que, en realidad, habían llegado a las arcas federativas por parte de una empresa bancaria para apoyar el torneo Sub-17; esto según confirmó a El Diario de Hoy un delegado presente en el lugar, quien pidió reserva de su nombre.
Luego, Carrillo y el resto del Comité intentaron que les validaran los estados financieros en el reciente congreso extraordinario de abril pasado, pero dicho congreso no se realizó por no haber acuerdo en los puntos de agenda. El estado financiero de la Fesfut no es transparente y está bajo la lupa, aún cuando administran millones de dólares anualmente. Además, no existe una rendición de cuentas a detalle del uso de esos fondos, lo que da lugar a conjeturar sobre posibles manejos irregulares.
La nueva empresa que se encargará de transmitir los juegos eliminatorios de la Selecta en Catar 2022, fue una filial de Mediaworld, señalada en el mencionado caso FIFA Gate
10. Pobre administración de infraestructura
Jugadores y entrenadores de selecciones lamentan el mal estado de las canchas 2 y 3 del Complejo de la Fesfut en la Colonia Escalón. No sólo están descuidadas, sino que a veces no tienen ni siquiera las líneas de cal reglamentarias.
11. Venta de derechos
Cuando el Comité Ejecutivo 2014-2018 tomó el poder de la Fesfut, sus miembros lamentaron que los anteriores habían vendido antes los derechos de TV de la Selección. Los criticaron. Pero cuatro años después, ellos han hecho lo mismo: no permitieron que el nuevo comité se encargara de la venta de dichos derechos (ahora para 2018-22), sino que los comercializaron ellos, con lo que dejan comprometidas a las nuevas autoridades que lleguen hacia el próximo periodo. Lo anterior es grave, más cuando la adjudicación de derechos televisivos mundialistas de años pasados está bajo investigación y sospecha de sobornos, lo que incluso tiene tras las rejas a varios dirigentes del fútbol latinoamericano, dentro del llamado “FIFA gate”.
12. Mercadeo y amistosos en casa, descuidados
En los cuatro años de gestión de esta Fesfut, nunca formó un departamento de Mercadeo que diera valor al fútbol nacional. Tampoco aprovecharon a la gran población de salvadoreños en Estados Unidos para realizar amistosos en más fechas FIFA, con lo que perdieron la oportunidad de generar ingresos; esto a pesar de la precaria situación financiera de la federación, según ha expresado siempre el mismo Carrillo.
Encima, sólo fueron capaces de organizar dos amistosos en El Salvador en estos cuatro años, ambos en 2014: ante República Dominicana y Panamá.