No me refiero, aclaro, a las personas que buscan la presidencia de la República, de cualquier partido actual (o en formación). De ellas, lo menos que espero es que de verdad incluyan el deporte como parte de su plataforma de Gobierno, con proyectos o programas concretos; ya no con el rayado discurso de “sí, el deporte ayuda a que nuestros niños y jóvenes se alejen de la violencia”, que muchas veces queda en letra muerta.
No escribo, entonces, sobre esas candidaturas. Me refiero, ahora sí, a las personas que desde ya se están planteando llegar a la presidencia de la Federación Salvadoreña de Fútbol.
¿Jugadores, atenderán el llamado?
Una carta para los jugadores de la Selecta en miras al duelo amistoso contra Honduras
En agosto de 2018 habrá nuevo presidente en la Fesfut. Para quienes desde ya anhelan dirigir el fútbol nacional, les pido que, antes de siquiera presentarse a las elecciones, le informen a la afición lo siguiente, cada uno. Son siete preguntas, siete tiros a gol:
¿Qué plan tiene para recuperar la confianza de la empresa privada, y que ésta invierta más en el fútbol?
¿Cuáles proyectos tiene para presentar a FIFA y desarrollar nuestro balompié?
¿Ya hizo un plan a largo plazo para una mejora progresiva de los escenarios futboleros del país?
¿Está dispuesto a hacer públicas las finanzas de la Federación, que les cuenten dólar a dólar cómo reciben la institución, y ser transparentes en su gestión hasta 2022?
¿Cómo modernizará a la Fesfut en cuanto a sus empleados, dado que otras federaciones del mundo trabajan con mucho más personal de tipo técnico y no tanto oficinista?
¿Qué estrategia tiene para recuperar la credibilidad en la afición fuera y dentro del país; y, muy importante, de los seleccionados de todos los niveles?
¿Estaría dispuesto a participar en un debate abierto, público, donde defienda sus propuestas ante los otros candidatos, para que veamos quién está mejor preparado para el cargo?
Hay más preguntas. Estas son algunas bien básicas. Si no tiene respuestas… por favor, ni participe. Gracias.