El Schalke se convirtió hoy en el cuarto semifinalista de la Copa de Alemania tras derrotar al Wolfsburgo por 1-0 y sumarse así al Bayern, Bayer Leverkusen y Eintracht Fráncfort que ya se habían impuesto en sus respectivos emparejamientos,
El Eintracht se impuso hoy por 3-0 al Maguncia mientras que en los partidos de ayer el Bayern goleó a domicilio al Paderborn (0-6) y el Leverkusen derrotó por 4-2 al Werder Bremen en la prórroga.
El duelo entre el Schalke y el Wolfsburgo resultó a la postre el menos vistoso de los cuatro partidos de cuartos de final, con pocas acciones ofensivas y pocas ocasiones para los dos equipos. En el minuto 10 el Schalke abrió el marcador por intermedio del austríaco Guido Burgstaller en una jugada de contragolpe que inició Amine Harit en la propia área.
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Los otros dos partidos de cuartos de final los jugarán el miércoles, el Eintracht Fráncfurt contra el Maguncia y el Schalke contra el Wolfsburgo
Tras la recuperación de pelota de Kehrer a Yunus Malli, bastaron tres pases para que Burgstaller llegara al área y definiera con un remate cruzado. En el 15 vino otra llegada buena del Schalke que terminó con un remate desviado de Marco Pjaca.
El Wolfsburgo llegó dos veces con peligro en la primera parte y en ambas ocasiones alrededor del minuto 24. La primera fue una falta lanzada por Maximilian Arnold que el meta Ralf Fährmann tuvo que desviar a saque de esquina.
En el lanzamiento del córner, Yunus Malli aprovechó un rebote para soltar una volea que se estrelló contra el larguero. El partido era parejo, los dos equipos tendían a neutralizarse y -pese al gol del Schalke y a la doble ocasión del Wolfsburgo- había pocas acciones de área claras.
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La mayor parte del segundo tiempo transcurrió de forma intrascendente y sólo llegó a verse una jugada de peligro clara en el minuto 84, en una falta a favor del Wolfsburgo seguida por una serie de cabezazos al final de los cuales Leon Goretzka salvó al Schalke sacando el balón de la raya de gol.
Al final el solitario gol de Burgstaller resultó suficiente para el Schalke ante un Wolfsburgo que en ningún momento mostró verdadera voluntad de lanzarse por el empate para forzar la prórroga.