Melania Gydos es una mujer poco convencional. Lo dice su aspecto físico, pero también su forma de ser y de ver la vida.
Actualmente tiene 27 años y le ha tocado lidiar con una rara enfermedad, que afecta a una de mil personas. Por ella ha sido rechazada en varias ocasiones, y considerada “rara” o fea.
Melanie padece displasia ectodérmica, un desorden genético que le provocó el desarrollo anormal de varias partes de su cuerpo.
Señoras de la tercera edad brillan en un concurso de belleza
Entre ellas la quijada, tiene pocos dientes y uñas, su piel es blanca y fina, escaso cabello a veces no existe en ciertas áreas del cuerpo y además experimenta otros síntomas como la visión deficiente y la ausencia de sudor y lágrimas.
Aparte de esos tristes antecedentes, su vida familiar ha sido muy complicada. Creció en un hogar violento con problemas de alcohol lo que provocó que varias veces considerara suicidarse.
Pero el rumbo de su vida dio un giro inesperado cuando su novio, un fotógrafo la instó a probar un casting de modelaje.
De oficial del ejército a reina de belleza
Aquí comienza la mejor parte de su historia…
En una entrevista a Yahoo, Melania dijo que su sueño era ser admirada por todos. “Siempre quise estar en una valla o una pantalla de cine”.
Para acercarse un poco a sus propósitos decidió estudiar bellas artes. En la carrera hacía autorretratos, los cuales le ayudaron mucho a aceptarse a sí misma y descubrir que tenía algo bello y particular.
Un día, su novio encontró un aviso en la página de los clasificados de Craiglist, en ella fotógrafos anunciaron que buscaban rostros nuevos y únicos para convertirlos en modelos.
Le presentó la propuesta a Melanie y ella aceptó con miedo. Su novio hizo un portafolio pequeño con el cual entró a competir con las demás chicas que enviaron sus fotos.
Fue escogida para modelar y en ese punto comenzó su carrera. Una vez instalada encontró su propósito en la vida. “Empecé a modelar no por otros, sino por mí. Pero lo que me he dado cuenta es que al hacerlo por mí, inspiro a otras personas a sentirse más cómodas consigo mismas”, asegura.
Le dicen fea, está acostumbrada a eso, pero no le importa porque tiene todo lo que necesita para ser feliz. Su belleza espectacular la convierte en alguien que no tiene nada que envidiar de otros.
Su cuenta en Instagram tiene al rededor de 120 mil seguidores y es una modelo muy cotizada.