Rebeca Zavaleta Ulch, la fuerza de la mamá migrante

Dejó El Salvador con 18 años, 80 dólares y embarazada de cinco meses. Se fue a vivir a Toronto y la pasó muy mal. Hoy es una reconocida bloguera de moda en Canadá.

descripción de la imagen
elsalvador.com

Por Claudio Martínez

2017-05-27 6:00:51

A los 18 años, un embarazo no deseado cambió para siempre la vida de Rebeca Zavaleta. Aquella niña que había estudiado en un colegio de monjas y cursaba su cuarto semestre de la carrera de Comunicaciones en el Universidad José Matías Delgado se vio obligada a tomar una decisión: viajar e instalarse, a pesar de no tener papeles, en Toronto, Canadá. “Estaba embarazada de cinco meses, iba a ser mamá soltera… Y me fui buscando una oportunidad para mi hija, sabiendo que mi madre se había mudado allí unos años antes”, confiesa ella.
Su capital eran 80 dólares y tiritaba del temor. “Fui con un miedo horrible, no sabía lo que me iba a encontrar del otro lado”, cuenta. Viajó en avión, con visa de turista, pero con toda la intención de quedarse.
Hoy, 18 años después, aquella joven que luchó contra todo y todos, que incluso sobrevivió limpiando casas, es una reconocida “influencer” de la moda y estilos de vida en la sociedad de Toronto. Su blog, Wishbone & Clover, es un auténtico éxito. Tiene más de 25,000 seguidores en Instagram, su propia empresa y es contratada por diferentes marcas para hacer campañas. Sin embargo, lo mejor de este “sueño canadiense” hecho realidad, lo que más llena de orgullo a Rebeca es su hija Paula, que ya tiene 17 años.


“Todo muy difícil. Al poco tiempo de llegar allá arreglé los papeles y me convertí en ciudadana, tenìa la ventaja de que mi madre había llegado antes bajo un programa laboral. Al principio todo me preocupaba: el embarazo, clima horrible, los inviernos tremendos, la cultura??? Pero una vez que nació Paula, me dieron la oportunidad de poner a mi hija en una guardería y así empecé a trabajar desde cero: limpiaba casas para poder ayudar a mi mamá, que se ganaba la vida como niñera, y así salir adelante”, explica sin pena.
Para peor, a su madre le diagnosticaron cáncer y dos años después murió. “Durante la enfermedad, era como tener dos niños, tenía que cuidar de ambas. Tenía como tres trabajos a la vez. Fue muy duro, pero eso me hizo crecer de golpe”, admite Rebeca Zavaleta Ulch. El Ulch es el apellido de su esposo, Gavin, un estadounidense de origen alemán con el que ha compartido los últimos 12 años de su vida.

Ivonne Ayala, la árbitro internacional que es madre y padre

Al final todo empezó a estabilizarse un poco: “Además, ya había aprendido el idioma, porque llegué pensando que sabía hablar inglés y después me di cuenta que no entendía nada??? Se me dio la oportunidad de estudiar y elegí Fashion Communication Management en la Ryerson University”.
De repente, y ya con el título universitario, Rebeca empezó a moverse en el mundo del marketing y la publicidad. “Trabajé en mercadeo para Sears en oficina central de Canadá, pero luego me cambie para trabajar en agencias de publicidad. Me empezó a gustar más el aspecto creativo”, reconoce. Pero el salto gigante lo dio cuando hace un año empezó creó un blog llamado Wishbone & Clover: “Es una forma de expresarme creativamente, un espacio para compartir la moda, lo que me inspira. En Toronto es muy común”, explica.

 


“Tengo clientes como Lacoste, Guess Jeans y hago campañas con ellos, lo mismo que para varias cadenas de hoteles. Se me han abierto las puertas. Viajé a México, Jamaica, ayudando a promover lugares. Además, organizo eventos, y convoco bloggers??? Incluso tengo ahora tengo una agencia que representa a otros bloggers. De repente, hay eventos que consigo que entre todos los influencers juntemos un millón de seguidores”, explica. Incluso a hecho de modelo en varias campañas: “Es que todas tienen que ser talla 0, esas no son mujeres reales. Por eso es importante el nivel de confianza que uno proyecta”.
De visita en El Salvador, la primera en los últimos seis años, Rebeca no deja de pensar en su hija Paula ni de sorprenderse por lo que ha cambiado su país: “Lo veo cambiado, más moderno, con negocios nuevos??? Todo eso también lo reflejaré en el blog para que en Canadá vean las bellezas de El Salvador”.