Poetas y escritores salvadoreños recordaron el legado de Ricardo Lindo Fuentes al conocer la noticia de su fallecimiento, ayer domingo.
El poeta salvadoreño falleció por la mañana tras ser internado en el Hospital Médico Quirúrgico por complicaciones de salud, según una fuente cercana a la familia.
Lindo Fuentes deja atrás un inmenso legado, lleno de una obra enriquecedora que dio forma a toda una generación de escritores.
A lo largo de su carrera, se embarcó en diversos estilos de la escritura, pasando por la narrativa, poesía, teatro e incluso ensayos.
El poeta Carlos Clará aseguró que fue Lindo quien nutrió a su generación “con su vasto conocimiento de la gran poesía universal y su misma obra es un referente nuestro, el de la poesía de la posguerra salvadoreña”.
Este ha sido el peso del literato sobre El Salvador. Clará reiteró que no se puede entender la literatura salvadoreña contemporánea sin Ricardo Lindo.
María Cristina Orantes, poeta del grupo Poesía y más, comentó haber recibido la noticia con gran impacto. “Era una persona respetada por su intelectualidad y su trabajo en la investigación, pintor, crítico de las artes visuales. El país se queda con una deuda para él”, agregó.
Lindo Fuentes ha dejado una huella imposible de borrar. Es así que el impacto consagrado que deja en la literatura salvadoreña es monumental. Entre sus obras más importantes están “El arca de los olvidos”, “Jardines” y “Estampas de un reino”.
Mario Noel Rodríguez, poeta y amigo cercano de Lindo, declaró que “El arca de los olvidos” es una las obras fundamentales para conocer su pensamiento poético, siendo así uno de los “libros que forma parte de la literatura básica salvadoreña”.
En cuanto a “Estampas de un reino”, el escritor Mario Zetino indicó que “el poemario, a mi juicio, es uno de los mejores libros de la poesía salvadoreña contemporánea”.
Este legado pesa sobre los hombros de muchos escritores de la generación de posguerra, y es por esto que su muerte se vuelve en una gran pérdida, no solo para El Salvador, sino para las letras. Así lo relató Otoniel Guevara, quien considera que no solo perdemos a un poeta sino a un artista multifacético.
Jorge Ávalos, escritor y amigo cercano del talentoso hijo de Hugo Lindo, recordó de él sus enseñanzas en la formación del oficio del arte.
Al cierre de esta edición, todavía no había información sobre dónde serán velados los restos del poeta.