Se trata de Poveglia, una isla pequeña e insignificante situada en los territorios de Venecia, Italia. Apodada la Isla de la Muerte, se dice que es uno de los lugares más embrujados del planeta, y quienes la han visitado aseguran haber sido víctimas de extraños fenómenos y apariciones fantasmales. Por ello está abandonada y no se permite la entrada a los turistas.
Su terrible historia
Poveglia se remonta a los días oscuros de la peste bubónica, también llamada “Muerte Negra”, una enfermedad que mató a la mayoría de las víctimas a los cuatro días de tener la infección.
A comienzos del siglo XIV, en la ciudad de Venecia, la enfermedad comenzó a cobrar un número interminable de vidas. El olor a muerte se hacía insoportable por lo que llevaron los cuerpos a esa isla.
Se cree que la gran cantidad de cadáveres formaron una “capa” de ceniza pegajosa en la parte superior de la tierra de la isla. De ahí que los pescadores no la visitaban por el riesgo de encontrar huesos humanos o partes amputadas. Y Poveglia fue evitada por muchos años.
Pero en 1800 alguien construyó un hotel para enfermos mentales. Se dice que los pacientes, una vez se instalaron en la isla, comenzaron a tener horribles visiones de cadáveres fantasmales y espíritus de las víctimas de la plaga. Los relatos fueron rechazados por los médicos, pues quienes afirmaban haber visto a los fantasmas eran considerados locos o mentalmente inestables.
Pero hay más. En la década de 1920, un médico del hospital torturó a una gran cantidad de pacientes en la torre del hospital, donde se realizaban experimentos. Con el tiempo, el doctor también enloqueció, empezó a tener visiones de espíritus de las víctimas de la peste y de sus pacientes torturados.
Atormentado por las horribles visiones, el médico trató de suicidarse saltando desde la torre del campanario. Pero según la leyenda sobrevivió a la caída, sin embargo una niebla densa proveniente de la isla lo mató. Desde ese momento, la isla de Poveglia quedó en el olvido.