Han transcurrido 20 años desde el día en que iniciaron las investigaciones arqueológicas en el sitio Ciudad Vieja. El lugar está ubicado a pocos kilómetros de la ciudad de Suchitoto y fue el asentamiento de la Villa de San Salvador desde 1528 hasta 1545, año en el que sus pobladores se trasladaran al actual Valle de la Hamacas o San Salvador.
Ciudad Vieja inspiró en 1996 al doctor y arqueólogo William Fowler, de la Universidad Vanderbilt, y a otros arqueólogos salvadoreños como Roberto Gallardo, José Heriberto Erquicia, Marlon Escamilla y miembros del Departamento de Arqueología de laSecretaría de Cultura como David Mezana y Hugo Díaz a sumergirse en las entrañas del sitio para descubrir qué sucedió en el pasado.
El pasado martes la Secretaría de Cultura de la Presidencia a través de la Dirección de Patrimonio Cultural y Natural y el Museo Nacional de Antropología junto a la Academia Salvadoreña de la Historia y Vanderbilt University, hicieron el conversatorio “Dos décadas de investigación arqueológica en Ciudad Vieja”, a la cual estuvieron invitados los arqueólogos involucrados en los trabajos de recuperación.
Las investigaciones iniciaron en 1996 y se desarrollaron en diferentes temporadas, muchas veces continuas o con lapsos de descanso. Aún así, todos esos años de trabajo estuvieron encaminados a dos objetivos: la investigación y a la transición de un sitio arqueológico a parque arqueológico, que cuente con las condiciones mínimas para el acceso público.
Principales hallazgos
Dos décadas de investigación hicieron posible obtener un mapa del sitio y conocer todos los lugares específicos que había en él, como la plaza, el cabildo, las casas y los materiales de construcción.
El cabildo, uno de los lugares más importantes de Ciudad Vieja, fue estudiado a profundidad, pues era allí donde se desarrollaban todas las funciones relacionadas a la administración. El doctor William Fowler destacó que: “La plaza mayor fue mejor estudiada en el 2001, también descubrieron casas españolas con características interesantes como un muro ovalado y baldosas de colores en verde, rojo y morado. En cualquier caso, eso habla de los recursos que los dueños de la casa tenían”.
Luego añadió: “encontramos un lugar que contaba con un taller de herrería, comedor, taberna y carbonera, un sitio donde se podían hacer varias actividades, una de las principales estructuras comerciales”.
Ciudad Vieja se considera como el primer asentamiento estable de los españoles. La zona era habitada por pipiles y tlaxcaltecas, los mismos grupos étnicos que acompañaron a Pedro de Alvarado en su conquista.
En el conversatorio los arqueólogos presentaron los trabajos de limpieza en el sitio que iniciaron el año pasado, pues el lugar estaba completamente abandonado.