Alcachofa, antigrasa
La actividad terapéutica de la alcachofa no está en la flor que consumimos, sino en las hojas de la base. Allí se encuentra la cinarina, un compuesto fenólico con propiedades antioxidantes que favorece la función hepatobiliar.
“La alcachofa favorece la producción de bilis y eso ayuda a digerir, sobre todo las grasas; también tiene un ligero efecto diurético que ayuda a la eliminación de líquidos. Y al ser un antioxidante muy potente, evita la oxidación del colesterol reduciendo el malo (LDL), y favoreciendo el bueno (HDL)”, indica Teresa Ortega, profesora del departamento de Farmacología de la Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid.
Su poder depurativo, antigrasa y diurético ayuda a reducir peso, como se ha comprobado en diferentes estudios científicos.
Los preparados de alcachofa se deben tomar después de las grandes comidas.
Hinojo
Esta planta es ideal contra los gases, por lo que sus infusiones son buenas opciones en caso de digestión pesada o mala digestión.
Además ayuda a contrarrestar los gases, debido a que es una planta que favorece la digestión. Además, es capaz de aliviar los cólicos que pueden aparecer como consecuencia de dichas flatulencias.
El té de hinojo es fácil de hacer, solo debe hervir unas semillas de la planta por cinco minutos, luego debe tapar la infusión, dejar reposar por tres minutos para luego colarlo y beber.
Té verde
Las propiedades y beneficios del té verde son muchas. Este te ayuda a acelerar la actividad del hígado y a aumentar la producción de enzimas de desintoxicación.
Según el doctor Alberto Cormillot, las hojas contienen epigalocatequina-3-galato (EGCG) y los flavonoides, que son antioxidantes potentes captadores de radicales, que desintoxican el cuerpo y eliminan el daño causado por los radicales libres.
El té verde está disponible en el mercado en forma de hojas, polvo o bolsas de té. La preparación es fácil, pero evita añadir leche o azúcar, ya que obstaculiza su actividad desintoxicante.
Cardo mariano
Es útil para prevenir la toxicidad hepática que causa el consumo de alcohol, la prevención del daño, según reconoce la Agencia Europea del Medicamento, y se investiga si también podría evitar el impacto de las grasas, de alimentos fuertes como las setas o, incluso, de los efectos de algunos medicamentos.
“Lo que sí está comprobado en la investigación es que el cardo mariano no solo previene el daño sobre la célula hepática sino que contribuye a su regeneración”, apunta Teresa Ortega, profesora del departamento de Farmacología de la Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid.
El principal principio activo del cardo mariano es la silimarina, una mezcla de compuestos que se encuentra en los frutos y se consume en preparados sin contraindicaciones, tan solo alergias a las plantas de la familia compuestas, como las margaritas.
Ajo
Los compuestos naturales que contiene actúan como antioxidantes. Además, el ajo posee un compuesto que funciona como antibiótico y puede usarse para ayudar a combatir la presión alta y activar el sistema inmunológico.
El ajo es recomendado para desintoxicar el cuerpo debido a su multitud de beneficios de salud, pues molido o crudo tiene dos poderosos compuestos. El primero es alicina. Este tiene propiedades antibacteriales y antioxidantes.
El segundo compuesto que posee es el sulfuro de dialilo, que impulsa el sistema inmunológico y puede jugar un papel en la disminución de la presión.