Después de la tormenta, llega la reconstrucción estética

Hasta hace unos años el tratamiento contra el cáncer de mama no tomaba en cuenta el factor emocional ni psicológico. Hoy se considera indispensable para recuperar la calidad de vida de las sobrevivientes.

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elsalvador.com

Por Alfredo García

2015-10-18 10:40:00

La noticia de un diagnóstico de cáncer es dura para cualquier persona, y aunque la preocupación estética no aparece en primer lugar, las pacientes se ven obligadas a confrontar los cambios en su aspecto por la alopecia -pérdida de pelo-, la palidez o la sequedad de piel que generan la quimioterapia, o por las consecuencias físicas y emocionales de la mastectomía. 

La pérdida de una parte del cuerpo es, obviamente, muy impactante a nivel psicológico, pero la mastectomía suele serlo en especial, por las connotaciones que la mama tiene a nivel social, sexual o de maternidad. 

Es entonces cuando entran en escena un heterogéneo universo de ayudas estéticas -desde prótesis a pelucas, pasando por bañadores o lencería-, que son un recurso más, dentro de la atención integral que las personas con cáncer requieren. 

El tratamiento estético es un proceso que puede durar hasta varios años. La cirugía estética se puede practicar según el caso de cada persona. “Todo depende, hay algunas pacientes que en la misma cirugía donde se quita la mama se les puede poner una prótesis. Hay otras a las que hay que ponerles primero un expansor para que la piel se estire. Hay varias etapas”, explica  el doctor David Bará Egan, especialista en cirugía y laparoscopía avanzada, y coordinador de la unidad de mama del Hospital de Diagnóstico.

Tomando en cuenta la importancia que tiene la estética en las sobrevivientes de cáncer para su autoestima y salud emocional, la Asociación Gente Ayudando Gente ha coordinado en los últimos años varias jornadas de reconstrucción. Las cirugías son lideradas por el doctor Rajiv Sood, director de las Unidades de Quemados de los Hospitales Riley y Eskenazi en Indianapolis, Indiana, Estados Unidos. El equipo de médicos dona su trabajo y tiempo para ayudar a programas sociales de países como El Salvador. 

El fin es mejorar la calidad de vida de las pacientes después de la dura enfermedad. 

Alteraciones estéticas

Los tratamientos de quimioterapia y radioterapia pueden producir cambios drásticos en la imagen, que acarrean efectos psicológicos. Estos son algunos de los principales problemas y algunos consejos para minimizar sus daños:

Alopecia. Cuando la caída del cabello es total se aconseja rasurarlo cuando se den los primeros síntomas para impedir que se produzca la pérdida masiva. Se  recomienda el uso de gorros o pañuelos de algodón a los que se pueden añadir flequillos o patillas que simulan pelo. 

Otra opción es la peluca, que permite mantener la imagen habitual o cambiarla; no obstante, se desaconsejan las que requieren el uso de pegamentos porque estos puede producir llagas o heridas en el cuero cabelludo. 

Pero ¿Cómo cuidar el cuero cabelludo? Es recomendable usar siempre protector solar e incluso protección física. Se aconseja dejar la cabeza descubierta al menos seis horas al día para facilitar la higiene y transpiración de la zona.

Alteraciones de la piel. La piel experimenta cambios debido al efecto de los tratamientos contra el cáncer. Entre ellos la hiperpigmentación, que puede producir el oscurecimiento generalizado de la piel y las mucosas o darse de forma localizada. También puede aparecer en zonas cubiertas por vendajes y en los pliegues de manos y pies. Este oscurecimiento suele remitir entre seis y doce meses una vez finalizado el tratamiento. Se desaconseja usar cremas despigmentantes sin consultar previamente al especialista. 

Otros de los efectos relativos a la piel son la sensibilidad a la radiación, la irritación cutánea y la sequedad, que puede darse en todo el cuerpo o en una zona determinada y su prevención es importante.