10 respuestas que le puedes dar a tu hijo acerca del acoso

Nada causa más tristeza a los padres que descubrir que sus hijos fueron acosados en la escuela. Cuando esto ocurre, los padres pueden enseñar a sus hijos estas importantes lecciones

descripción de la imagen
elsalvador.com

Por Cristina Sardoy, Deseret News

2015-09-02 10:52:00

Nota del editor: este artículo fue publicado originalmente en Making Life a Bliss Complete. Se reproduce aquí previa autorización. Según Dictionary.com, un “bravucón” es “una persona prepotente, peleadora, despótica que habitualmente acosa e intimida a personas más pequeñas o débiles”.

Mi hijo de 9 años fue acosado, tanto física como verbalmente. Un día, manifestó que quería hablar sobre los bravucones. Le pregunté de qué quería hablar específicamente, y no sabía. Entonces, respiré hondo, dije una oración en silencio buscando una guía y terminé diciendo: 

1. Deberías tener compasión por los chicos que dicen palabrotas, que son malos o se burlan de ti 
¿Por qué los chicos hacen estas cosas? Las razones son muchas: tienen amigos o familiares que dan malos ejemplos; no se sienten queridos o estimulados en su casa; son maltratados por los padres u otros miembros de la familia; han sido acosados anteriormente; sus elecciones en los medios de comunicación promocionan el acoso; no tienen muchos amigos; no saben que tú o ellos son hijos de Dios; no se dan cuenta de que la verdadera alegría procede de ayudar y amar a los demás.

Podría ser cualquiera de estas razones u otras. Mira la lista. Es cierto que su conducta no se debe excusar, pero no son simplemente acosadores. También tienen sufrimientos y luchas. Dicho esto… 

2. No eres lo que esos chicos dicen que eres 
Llegará un momento en que no te sentirás mal cuando esos chicos sean malos contigo. Es importantísimo no creer en lo que dicen los bravucones. Ellos no te conocen. Simplemente detectan una característica que no les gusta de ti y te definen por ella, o inventan algo sólo para divertirse y verte flaquear. No permitas que alguien que no te quiere defina quién eres.

Simplemente piensa: “Sé que yo no soy eso. Soy hijo de Dios. Mi familia me ama. Tengo buenos amigos. Me esfuerzo todo lo que puedo en la escuela. No voy a dejar que esto me moleste. No voy a dejar que me humillen y traten de cambiarme. Sé lo que valgo”. 

3. No dejes que otro trate de cambiarte 
A veces, los chicos se toman a pecho las cosas mezquinas que les dicen. Si son acosados por su ropa, quieren usar ropa más a la moda y más linda. Si los acosan por ser agradables con un chico impopular, dejan de ser agradables con ese chico. Si los acosan por colaborar en clase, dejan de ayudar a su profesor o profesora.

Algunos chicos piensan incluso que si se vuelven acosadores, pueden huir del acoso. No te doblegues. No va a hacerse amigo tuyo si cambias. Simplemente se reirá y se dará cuenta de que ejerció poder sobre ti. Recuerda siempre que eres especial. Recuerda qué es lo importante. Recuerda quién eres. 

4. Los chicos siempre encontrarán la forma de burlarse, ya sea de la ropa, del tipo físico, del intelecto, de los valores 
A veces, los chicos se burlan de cualidades positivas. A menudo, los chicos acosan porque están celosos. Por eso a veces se burlan por cosas buenas, como por ejemplo ser una persona amable u obtener buenos resultados en la escuela. Nunca supongas que estás haciendo algo mal si te acosan. 

5. No mientas para evitar que se burlen de ti 
Cuando era adolescente, recuerdo haber mentido a veces sobre cosas tontas, como decir que tenía dos pares del mismo jean cuando en realidad usaba el mismo par dos días seguidos. Mentí muchas veces en el secundario cuando me preguntaban por las salidas románticas y todavía no me dejaban salir.

Cada vez que mentía era porque me daban miedo las burlas, los chismes y que me señalaran con el dedo. Nunca debes mentir. Lo que hacía yo estaba mal. Quizás evité un mal pero invité a otro. Mantén tu integridad. Di la verdad y no te avergüences. 

6. Nunca pelees 
Si el acoso va más allá de los insultos, y un chico quiere pelear contigo, no debes iniciar una pelea. Si un chico te golpea, defiéndete si debes. No te enojes y no sigas peleando. Asegúrate de decírselo a un docente y di siempre la verdad. 

7. No todas las palabras mezquinas son insultos 
No insultes nunca a otros chicos. No uses palabrotas, ni en las conversaciones ni para acosar. Hay otras palabras que no son necesariamente palabrotas pero que se proponen humillar. Por ejemplo, cuando yo estaba en la escuela, muchas veces me decían “traga” porque obtenía calificaciones altas y ayudaba con gusto a los profesores. Básicamente, no uses ninguna palabra que tenga una intención de dañar. 

8. Cuando otro está siendo acosado, debes asumir una posición
A veces, cuando ves que un chico es acosado, quizá te dé miedo hacer o decir algo por temor a una venganza. Pero nunca tengas miedo de hacer lo correcto y brindar apoyo a una víctima siempre es algo bueno. Di a los chicos malos que paren.

Si no lo hacen, háblale al chico/o chica para preguntarle si está bien. Sé amigo de ese chico o chica, aunque eso signifique que se burlen de ti. Piensa cómo puedes ser útil. 

9. Si das un ejemplo no siendo malo, y no participando en el acoso, otros pueden seguirte
No todos los chicos quieren acosar o quedarse callados cuando ven a otros hacerlo. Simplemente tienen miedo. Si te ven defendiendo a otros, te sorprenderá cuántos te seguirán a ti y no al acosador. Eres una fuerza para el bien. 

10. Puedes hablar conmigo y con papá en cualquier momento, sobre cualquier cosa 
No hay nada de lo que no puedas hablar con nosotros. Seremos comprensivos. Escucharemos. Te daremos un abrazo. Te ayudaremos a superarlo. Rezaremos contigo y por ti. Te amamos. Eres un buen chico. Gracias por venir a hablarme de esto hoy.