El qbo, una innovación arquitectónica en El Salvador

Se trata de un diseño que tiene un mínimo impacto en el medio ambiente.

descripción de la imagen
elsalvador.com

Por Alfredo García

2015-09-12 7:04:00

El “qbo” es el nombre que denomina a una innovación arquitectónica ideada y elaborada por mentes y manos salvadoreñas.
Se trata de un sistema modular de diseño que tiene la  forma de un cubo, que puede ser utilizado como dormitorio, comedor, sala, lounge, oficina y muchas otras opciones.

Esta novedad de la arquitectura ha sido creada por EMC, ORG e Innoversa, tres empresas salvadoreñas.

“El qbo nació hace un año como una pequeña idea que se potencializó al compartirla con todo nuestro equipo. No lo hemos lanzado al mercado,  y sin embargo, ya tenemos un par de clientes que lo han visto y ya tenemos dos en producción y 3 que vienen en camino”, dijo la arquitecta Anita de Guerrero.

“Creemos que El Salvador ya necesitaba algo innovador. En el país tenemos terrenos complicados y el qbo tiene la ventaja que lo podemos poner en el patio de nuestra casa, en un plafón, dentro de un centro comercial, y en muchas partes”, agregó de Guerrero.

La versatilidad es una de las principales características de este cubo, que puede diseñarse para ser una casa en la playa, en el lago, una montaña, un jardín, la segunda planta de una casa y varios otros espacios.

Otra característica es que si una día los usuarios deciden mudarse, pueden llevarse con ellos su qbo. Esto se debe a que los materiales que se usan para construirlo son desmontables y reusables dos o hasta tres veces, según afirmaron sus creadores.

La arquitecta Eva Hinds también ha trabajado en la elaboración de este nuevo concepto. “Siempre habíamos querido un producto que capitalizara el conocimiento que tenemos las tres empresas, una de diseño, otra de construcción y la otra de acabados y mobilirario”, dijo.
“En el país vivimos en una realidad política económica en que la gente no quiere invertir mucho en un terreno, por la misma inseguridad. El qbo abre la posibilidad de que uno no está invirtiendo en un terreno sino en un producto que puede mover”, añadió Hinds.

El tiempo de edificación del qbo es mucho menor en comparación con una construcción tradicional.
Se requieren cuatro semanas para fabricar todos los paneles y piezas, y dos semanas para la instalación en el terreno. En seis semanas el qbo está listo para habitar.

“No se tiene que cambiar la tipografía del terreno en lo más mínimo… Es una solución amigable con el medio ambiente”, resaltó Hinds.
Los materiales empleados para la construcción de el qbo varían según la zona donde se coloque. Por ejemplo, para una casa de playa se emplea más madera.   

Entre los proyectos de los creadores del qbo están la creación de accesorios para interiores que también sean versátiles.
Además, uno de sus retos es crear el diseño de estructuras de dos niveles.