Un marcapaso tan pequeño como una pastilla de vitaminas o un diminuto sensor insertado en una arteria que envía a los médicos, de manera inalámbrica, cifras, estadísticas sobre la función cardiaca son algunos de los más recientes avances del Baptist Health South Florida.
Puede sonar como ciencia ficción, pero la medicina está avanzando cada año. “El cielo es el límite”, subraya el doctor Galed Hakim de Baptist.
Estos dispositivos y otros tratamientos innovadores son parte de los avances que ofrece la medicina hoy en día en cuanto a cardiología.
Medtronic Micra Transcather Pacing System (TPS), es el nombre del marcapaso diminuto.
Se instala en el corazón mediante un catéter insertado en la arteria femoral, donde el paciente puede pasar solamente una noche en el hospital.
Los marcapasos tradicionales, de un tamaño similar a una caja de fósforos, son implantados quirúrgicamente bajo la piel cerca de la clavícula.
Requiere el uso de guías o cables que se conectan al corazón. Pero el Micra TPS se ajusta de forma segura a las paredes del corazón mediante ganchos y no tiene cables.
Ambos tipos de marcapasos funcionan esencialmente de la misma manera, enviando pequeños impulsos eléctricos hacia el corazón para ayudar a controlar los latidos normales.
Existe además otro aparato que ayuda a los pacientes con fallas cardiacas. Denominado CardioMems, es un sensor de aproximadamente el tamaño de un sujetapapeles. Monitoriza los latidos del corazón y la presión en la arteria pulmonar, que lleva la sangre al corazón a los pulmones.
El sensor es colocado dentro de la arteria de la misma forma mínimamente invasiva que se implanta el diminuto marcapaso, a través de un pequeño catéter introducido en una arteria del muslo.
“Por lo general, los pacientes regresan a casa el mismo día y luego desde el sensor se envía información de forma inalámbrica a los médicos”, señala Hakim.
Cirugía robótica
El sistema robótico da Vinci para la cirugía ofrece un nuevo enfoque a la cirugía abierta tradicional. “Representa nuestro compromiso con los avances médicos más recientes, y hace las operaciones complejas más precisas y menos traumáticas” recalco Hakim.
El robot combina las expertas manos del cirujano con la tecnología del futuro. Un equipo quirúrgico prepara al paciente, haciendo varias incisiones en el cuerpo del tamaño de una moneda de diez centavos.
El equipo arma los cuatro brazos robóticos da Vinci con diminutos instrumentos quirúrgicos y una cámara, y lo rueda a su sitio sobre la mesa de operaciones.
El cirujano se sienta cerca frente a una consola, mirando un monitor con una perspectiva tridimensional y ampliada del interior del cuerpo.
De esta forma, usa controles de manos y pies para dirigir los brazos robóticos.
El sistema traduce las maniobras del cirujano en tiempo real – girando y rotando los micro-instrumentos según lo requiera la operación.
Aunque con flaquencia se le denomina robot, el da Vinci no puede ser programado o moverse por sí mismo, afirmaron los especialistas.
Con una precisión sin igual, un cirujano puede ampliar el alcance de movimiento y operar profundamente en el cuerpo. Los cirujanos en Baptist Health especialmente capacitados y certificados por la Junta utilizan el da Vinci para realizar varios procedimientos quirúrgicos.