La reina de España, Letizia Ortiz, finalizó ayer su viaje por El Salvador con la visita a Casa Presidencial, donde se reunió con el presidente Salvador Sánchez Cerén.
En el brindis del almuerzo, doña Letizia reafirmó la apuesta de España por apoyar en El Salvador “la defensa de los derechos de la mujer, las mejoras en el acceso al agua potable, la salud, la educación, la cultura y el fortalecimiento institucional”.
La reina subrayó que para ella es “un honor” haber podido representar a España por primera vez en el mundo de la cooperación al desarrollo, y garantizó a Sánchez Cerén la disposición española a ser “parte activa” en la lucha contra la pobreza de El Salvador.
“Colaboramos para reducir la exclusión, la pobreza y la vulnerabilidad”, subrayó la soberana ante el presidente y su esposa, Margarita Villalta, a quienes mostró la voluntad de España de contribuir de forma “relevante” al desarrollo de su país mediante su intervención en “sectores críticos”.
“España quiere ser parte activa de ese desarrollo y apuesta decididamente por apoyar los esfuerzos de su Gobierno y de toda la sociedad salvadoreña en su lucha contra la pobreza y en favor del desarrollo humano sostenible”, insistió Letizia, antes de elogiar el “importante salto cualitativo de El Salvador, que ha pasado de recibir a ofrecer cooperación”, según declaraciones recogidas por EFE.
Asimismo, Su Majestad tuvo ocasión de conversar con Sánchez Cerén sobre las prioridades de la colaboración bilateral durante la entrevista que mantuvieron antes del almuerzo, donde, a su llegada, recibió una estatuilla de torogoz, de dos niñas de la escuela España.
En su discurso, Sánchez Cerén agradeció a doña Letizia su apoyo a “proyectos exitosos” que “atienden necesidades prioritarias” de la población y recalcó que esta visita, “de gran envergadura”, llena a los salvadoreños “de mucho optimismo” y les aporta “un estímulo y una esperanza” de seguir contando con la ayuda de España para hacer de El Salvador “un país productivo, educado y seguro”, destacó la agencia española.
Visita intensa
La jornada de ayer comenzó con una reunión de trabajo en la Oficina Técnica de Cooperación, en la que la reina fue informada en detalle sobre las prioridades de la ayuda española destinada al país, que dispondrá los próximos cuatro años de nuevos fondos por importe de 100 millones de euros.
Posteriormente, recorrió La Casa Tomada, un espacio promovido por el Centro Cultural de España en El Salvador CCESV, por ello la acompañó el director de esta institución, Fernando Fajardo, quien explicó los trabajos de los jóvenes artistas con una veintena de colectivos culturales y creativos.
Asistió a un ensayo del grupo de teatro aficionado “La Cachada”, formado por vendedoras callejeras que llevan a escena sus propias experiencias, conoció los trabajos de un huerto urbano, escuchó a la banda “Clarence” interpretar para ella “Estremece mi corazón” y recibió dos obsequios confeccionados con material reciclado para sus hijas.
Además de estas prendas, los “habitantes” de la Casa Tomada le regalaron una amplia selección de la producción propia del centro, que incluía grabados, serigrafías, diseños de moda, bisutería con materiales reciclados, jabones, confituras y grabaciones de música y monólogos de teatro.
Después se trasladó a la sede del Centro Cultural de España en El Salvador, en donde saludó a un centenar de representantes de la colonia española, formada por unas 3.500 personas, y se interesó por una exposición de fotografías.
Durante su estadía en el país, la reina visitó varios de los lugares en los que los fondos de la Cooperación Española han servido para el desarrollo de la población de los municipios de Suchitoto y Jiquilisco.
De esta forma la soberana española finaliza una gira por Centro América, en la que conoció de cerca el trabajo de cooperación que realiza su país en Honduras y El Salvador.