Lo bueno y lo malo de los libros electrónicos

Estos dispositivos permiten facilidades que el papel no En El Salvador todavía no es común su uso y venta

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elsalvador.com

Por Alfredo García tendencias@eldiariodehoy.com

2015-01-13 12:00:00

Después de varios siglos, la forma de leer ha comenzado a cambiar con los lectores de libros electrónicos.

Dichos dispositivos han modificado en los últimos años la manera de disfrutar la literatura, ya que cambian la experiencia de tocar y oler el papel por una pantalla de luz blanca y tinta electrónica. Una idea que agrada a unos, es rechazada por otros o es asimilada con menos preocupación por los demás.

Entre las ventajas que ofrecen los libros electrónicos (o eBooks) se encuentra poder almacenar gran cantidad de libros en el mismo dispositivo, dejando atrás los espacios de una biblioteca.

Otro beneficio es que permiten una lectura multimodal, es decir que pueden incluir textos, imágenes, enlaces, vídeos, etc.

Por ejemplo, al leer la palabra “Siglo XV”, a través de un enlace el lector puede acceder a más información sobre ese siglo.

Al leer en un eBook también es fácil subrayar, copiar y compartir fragmentos del texto.

Sin embargo, para José Antonio Millán, autor de varios estudios sobre la lectura en España y responsable del blog Libros y Bitios, “siempre habrá libros muy aumentados, como los infantiles, con un despliegue muy llamativo. También habrá obras científicas con muchas adiciones que facilitarán el estudio o la comprensión, pero la novela podrá seguir siendo novela. En una edición de Ulises podrás ver un mapa, por ejemplo. Pero hay veces que no hace falta nada”, en un artículo para El País.

Aunque el precio de los lectores electrónicos es poco accesible para la mayoría (entre $100 y $300, según su capacidad), comprar libros digitales es mucho más económico. Por ejemplo, en Amazon pueden encontrarse desde los $2.

Además, cada vez hay una oferta más numerosa de libros digitales gratuitos.

A pesar de las ventajas de los eBooks, las encuestas afirman que, al parecer, los lectores no se desprenderán fácilmente del papel.

En una encuesta hecha en 2014 en Estados Unidos por Pew Research Center, la mayoría de los adultos, 7 de cada 10, sigue con sus libros de papel. Aunque también sigue aumentando la cantidad de lectores que eligen lo digital.

En un sondeo hecho para este artículo se constató que los principales almacenes de El Salvador no venden estos dispositivos, por lo que comprar uno puede ser un tanto complicado. Quienes deseen adquirir un lector de libros electrónicos debe comprarlo en Internet o en otro país.

Una desventaja es que algunas personas reportan mayor cansancio en la vista al leer en la pantalla del dispositivo. Sin embargo, los lectores actuales no emplean retroiluminación, a diferencia de los celulares o las tabletas. Esto vuelve la lectura menos cansada a la vista.

Otro inconveniente es que, a pesar de que el número de libros digitales crece cada año, aun la cantidad es mucho menor que los del papel. Y todavía está lejos de igualarse.