Videojuegos y consolas alternativas lideraron la exposición E3

La Electronic Entertainment Exp, mejor conocida como la e3, finalizó el viernes, dando un adelanto de los nuevos videojuegos; así como el de alucinantes dispositivos y consolas.

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elsalvador.com

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2013-06-15 8:00:00

Las grandes compañías de videojuegos mostraron todo su poderío en el E3, pero consolas alternativas y juegos independientes conformaron una feria diferente y fascinante.

Así fue la Electronic Entertainment Exp (E3) de la nueva generación de consolas, pero no sólo por la llegada Xbox One o PlayStation 4, sino por las propuestas innovadoras como Gamestick, Ouya, Shield o las gafas de realidad aumentada Oculus Rift.

El auge de los dispositivos móviles y los juegos tuvieron un gran impacto en el mercado y motivaron la creación de máquinas que aprovechen su potencial.

Gamestick es una consola para jugar a videojuegos creados para tabletas y móviles con el sistema operativo móvil de Android en la televisión y que cuesta 79 dólares (la misma cantidad en euros será el precio para Europa).

El dispositivo, rectangular, tiene el tamaño de dos dedos y se conecta al televisor por USB. Además, va acompañada de un mando.

“En estos tiempos es muy difícil pagar 500 dólares por una consola. (…) Los ‘smartphones’ han cambiado la industria para siempre. Ahora hay juegos de Android para todos, el mercado no para de crecer”, aseveró su responsable, Anthony Johnson.

Un concepto similar al de Gamestick es el de la consola Ouya (que costará 99 dólares, 74 euros), que también permite acceder a juegos para Android desde el televisor.

“Queríamos que los juegos divertidos de Android estuvieran disponibles para los jugadores y que el desarrollo de títulos para la televisión fuera sencillo”, explicó a EFE el portavoz de Ouya, Bob Mills.

Shield, de Nvidia, se cimenta en Android pero se aleja de la televisión: es una consola portátil (349 dólares, 261 euros) con una pantalla de 5 pulgadas para acceder a todos los juegos móviles disponibles en Google Play.

La portátil de Nvidia también sirve para escuchar música, ver películas y jugar por “streaming” a los juegos de PC.

Muy diferente es la propuesta de Sifteo Cubes, una consola que consiste en pequeños cubos con pantalla táctil diseñados para combinar el mundo físico y el virtual. Algo más grande que una nuez, las piezas cuadradas están pensadas para la enseñanza y los juegos de puzzle. Por ejemplo, para ayudar a un personaje a escapar de un lugar, el jugador tendrá que alinear los cubos de la forma acertada.

Sifteo Cubes forma parte de la muestra que Indiecade, el Festival Internacional de Juegos Independientes, tiene en el E3.

La fundadora de este festival, Stephanie Barish, explicó a EFE que los juegos independientes constituyen el futuro de la industria del ocio interactivo.

También indicó que la innovación y la creatividad son libres en los desarrollos independientes, ya que no están lastradas por grandes presupuestos ni departamentos de marketing, sólo guiadas por “la pasión y los sentimientos creativos” de sus promotores.

“Lo que puedes ver en la muestra de Indiecade es lo que verás en los próximos años en la exposición principal del E3”, aseguró.

Al llegar a la zona de Indiecade, el visitante siente que entra en otro E3 porque cada pantalla esconde un concepto sorprendente que poco tiene que ver con las superproducciones comerciales.

Es el caso de “Soundself”, una propuesta extrasensorial y psicodélica para las gafas de realidad aumentada Oculus Rift.

Cuando el jugador se pone las gafas y los auriculares para probar el título aprecia una espiral de colores en movimiento, y al emitir un sonido lineal consigue abrir un círculo oscuro en la animación.

Su creador, Robin Arnott, afirmó que “Soundself” pretende ofrecer una “experiencia trascendente” que permita a la gente conectarse con sus sentidos.

El objetivo de “Spin the Bottle: Bumpie’s Party”, un título “indie” y minimalista para Wii U, es que los jugadores puedan disfrutar con el ocio interactivo sin tener que renunciar a mirarse a los ojos o hablar. Por eso, huye de la pantalla y sólo utiliza el mando táctil de la consola a modo de tablero mientras los jugadores bailan juntos un vals, se imitan o se hacen cosquillas.