Aunque su entrada a la Asamblea Legislativa estuvo por momentos en la cuerda floja porque el CD alegaba como suyo ese escaño, el militar dice que las probabilidades de su victoria le eran favorables. Ahora se apresta a trabajar por los salvadoreños desde el Congreso.
¿Cómo recibe los resultados tras el recuento de votos?
Si queremos verlo desde el punto de vista positivo, se legitima a los candidatos, se legitima el proceso democrático y se genera confianza en la población, porque 20 mil votos no es despreciable que hubieran quedado (perdidos), porque hubiera generado una antipolítica en un momento dado y eso es muy peligroso para la democracia en El Salvador.
¿En algún momento tuvo temor de quedar fuera?
Nosotros como militares trabajamos en base a posibilidades y probabilidades. Era posible que podía quedar fuera pero no probable. Era posible porque había un recuento, pero no probable porque la probabilidad es que los partidos más grandes fueran los que más votos tuvieran y eso es lo que realmente sucedió. De 60 votos entre ARENA y CD queda una diferencia de 2 mil y pico de votos.
¿Espera asumir como diputado lo más pronto posible?
Yo creo que a más tardar martes o miércoles se debería estar dando si la Sala de lo Constitucional el mismo lunes da su resolución y su conformidad, ahí prácticamente muere el proceso.
¿En qué comisiones le gustaría trabajar en la Asamblea?
Me gustan Defensa y Seguridad Pública porque es el estudio que yo soy profesional, además de militar soy administrador con ciencias políticas, una maestría en seguridad pública y en seguridad nacional.
¿Tras las dudas se legitima a los diputados que llegan a la Asamblea?
Podemos decir que se cumplió, a regañadientes con cuestionamientos, pero lo importante es que hay un nuevo amanecer, que hay un nuevo despertar y un reto que cumplirle a la población que votó y a la que no votó.