Su marca se vende como el pan caliente. Es la Chiquita, en honor a la estatura de la empresaria salvadoreña Dora Escobar quien el fin de semana celebró con figuras de la comunidad salvadoreña y autoridades de Maryland la apertura de un centro de servios integrado en un moderno restaurante con su emblemático nombre.
Esta emprendedora mujer, originaria de Chalatenango, comenta a manera sencilla de dar el buen ejemplo que empezó su negocio vendiendo pupusas en las canchas donde los salvadoreños realizaban los partidos de fútbol, los fines de semanas, en la década de 1990, de ahí entró al ofrecer el servicio de envío de remesas a El Salvador y luego a los otros países centroamericanos, para beneficio de miles de inmigrantes que residen en Washington D.C. y Maryland.
A la vez se siente orgullosa de emplear a más de 150 salvadoreños en los diferentes negocios “con este centro que estamos inaugurando serían 10 agencias de envío de remesas y cuatro restaurantes, un logro que se lo debemos a la comunidad que nos ha aceptado y que viene a los negocios de la Chiquita y se sienten bien atendidos como en familia, a disfrutar de nuestra comida típica”, comenta luego de cortar la cinta de apertura del establecimiento.
El recinto cuya inversión supera $1 millón 500 mil, según explicó, es un amplio y renovado espacio ubicado justo en uno de los polos de mayor concentración de centroamericanos, en la ciudad de Hyattsville, Maryland, y en el populoso distrito de negocios latinos en la University Boulevard.
El establecimiento alberga el restaurante, la agencia de envío de dinero y espacios aptos para otros servicios profesionales que serán habilitados en los próximos días.
“Estamos celebrando porque esto no es de todos los días, es un esfuerzo que venimos haciendo desde hace muchos años. Ya son 22 años de estar en el negocio así que hoy estamos compartiendo con nuestros clientes, amigos y familiares este nuevo logro”, explicó.
La apertura del nuevo establecimiento contó con la presencia de figuras de la diplomacia como el embajador de El Salvador en Washington, Rubén Zamora, el senador estatal de Maryland, Víctor Ramírez, y el concejal de Prince’s George, Will Campos, gestores de ligas de fútbol y agentes de negocios de la diversa comunidad salvadoreña radicada en el área de la capital nacional de Estados Unidos; además de funcionarios de los gobiernos locales de Maryland.
Escobar aseguró que la empresa de La Chiquita Express y los restaurantes La Chiquita son negocios bien establecidos que han crecido con el tesonero esfuerzo de su familia, que cuida en detalle la calidad y el buen servicio a la numerosa clientela.
Si bien los invitados ya ocupaban buena parte del establecimiento por efecto de celebrar la apertura, la clientela no se hizo esperar, grupos de familias llegaban para disfrutar una cena de platos sencillos como pupusas, hasta un surtido menú de carnes, mariscos y otras exquisiteces a la carta.
Dora Escobar aseguró que este amplio establecimiento estará abierto para albergar todas aquellas actividades sociales para buenas causas con El Salvador, como parte de su compromiso con su país, pero reitera que también para todo lo que ayude a Estados Unidos, “es el país donde se me dio la oportunidad de ser lo que soy, una mujer de negocios”, acentuó.