Salvadoreño dice que sobrevivió 13 meses perdido en el Pacífico

El sujeto se llama José Salvador Alvarenga, tiene 37 años y desde finales de 2012, cuando salió a pescar con un amigo, estaba perdido en aguas del Pacífico

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Salvadoreño dice que sobrevivió 13 meses perdido en el Pacífico

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2014-02-03 10:00:00

WELLINGTON, Nueva Zelanda. Un misterioso náufrago que dice haber estado perdido en el mar durante 13 meses ya está sano y salvo en tierra, pero con muchas preguntas acerca de cómo pudo haber sobrevivido en su pequeño bote durante tanto tiempo a la deriva a través del Océano Pacífico.

El sujeto fue encontrado en un pequeño islote del Pacífico, el atolón de Ebon, a 22 horas de distancia en barco desde Majuro, capital de las Islas Marshall.

Ebon tiene menos de 6 km cuadrados de terreno, una línea telefónica y no hay servicio de Internet. El avión gubernamental que brinda servicio al atolón no funcionaba, así que náufrago solo llegó a Majuro ayer por la mañana.

El hombre dijo llamarse José Salvador Alvarenga, de 37 años, y es originario de El Salvador, aunque ha vivido unos 15 años en Tapachula, estado de Chiapas, cerca de la frontera con Guatemala.

Agregó que desea ser repatriado a México.

Aunque algunos doctores todavía dudan de la credibilidad de su historia, la noticia trascendió las fronteras, especialmente luego de que las primeras imágenes revelaran el curioso parecido de Alvarenga con el personaje de la película Náufrago, de Tom Hanks

Alvarenga, empleado de una sociedad pesquera llamada “Camaronera de la Costa”, afirma haber abandonado México el 24 de diciembre de 2012, en un pequeña embarcación de fibra de vidrio, de unos 7.3 metros de eslora, para pescar tiburones con otro pescador, cuando los fuertes vientos les alejaron de la costa y perdieron sus puntos de referencia.

Su compañero de infortunio, un joven de entre 15 y 18 años llamado Xiquel, habría muerto de hambre al cabo de algunas semanas antes de poder comer aves crudas.

No hay detalles sobre qué hizo Alvarenga con el cuerpo del joven.

“Para mi es difícil imaginar a alguien que haya sobrevivido por 13 meses en el mar”, dijo el embajador Tom Armbruster en Majuro. “Pero también es difícil de imaginar que alguien llegue a Ebon de la nada. Lo cierto es que este hombre ha pasado por una dura prueba y ha estado en el mar por mucho tiempo”.

El salvadoreño relata que sobrevivió comiendo aves, pescado y tortugas, bebiendo sangre de estos últimos animales cuando no llovía o bebiendo su orina. Para pescar pequeños tiburones, asegura que ponía un brazo en el agua como cebo antes de agarrar la cola del tiburón.

Asegura que no tiene todos los recuerdos intactos: “Todos los días era lo mismo, solo el mar, el mar. No vi nada más. El mar y mi barca. No tenía ni idea del tiempo, pero sé que fue del 21 de diciembre de 2012 cuando nos fuimos.

En ese sentido, dijo que desesperadamente quería llamar a su familia, su esposa y su hija de 10 años de edad, en El Salvador, pero él no recordaba el nombre de la aldea o de un número de teléfono. “He olvidado muchas cosas”.

En una entrevista en la cama de un hospital local con The Telegraph, de Londres, Alvarenga explicó cómo llegó a tierra.

“Acababa de matar un pájaro para comer y vi algunos árboles”, dijo al diario.

“Lloré, ‘Oh, Dios.’ Llegué a tierra. Por la mañana, me desperté y oí un gallo y vi pollos y en una pequeña casa vi a dos mujeres nativas gritando y gritando que no tenía nada de ropa… Estaba solo en ropa interior, y estaba rotas y desgarrada”, dijo Alvarenga citado por The Telegraph.

La gente de la isla, donde fue hallado el jueves, dice que la embarcación estaba en muy mal estado, y con varias tortugas muertas en la cubierta.

Alvarenga aseguró a The Telegraph que la muerte de su compañero lo hizo contemplar el suicidio. “Por cuatro días, quise matarme. Pero no pude sentir el deseo, no quería sentir el dolor. No pude hacerlo”.

Indicó que tiene familiares viviendo en Estados Unidos, detalló el embajador norteamericano en Majuro, Tom Armbruster, quien añadió que funcionarios estadounidenses tratarían de localizarlos.

Mediante un comunicado, El Salvador y México informaron que están coordinando la repatriación de Alvarenga.

El sobreviviente dijo al embajador mexicano, Julio Camarena, que es originario del pueblo de Garita Palmera, en el departamento salvadoreño de Ahuachapán y que no tiene familiares en México, detalló la cancillería en un comunicado emitido ayer.

Si la historia de Alvarenga resulta cierta, el viaje a través del Pacífico lo habría llevado unos 8,000 km en mar abierto antes de terminar en las Islas Marshall, casi a la mitad del camino entre Hawai y Australia, en el Pacífico norte.

En el pasado se han registrado casos similares de supervivencia en alta mar. El 9 de agosto de 2005, tres pescadores mexicanos partieron de un puerto de la costa del Pacífico en su país y, tras quedarse sin gasolina y averiarse su motor, fueron arrastrados por las corrientes mar adentro.

Más de nueve meses después fueron rescatados por un barco atunero taiwanés frente a las Islas Marshall. Sobrevivieron comiendo pescado y aves marinas crudas y bebiendo agua de lluvia, que almacenaban en el fondo de su bote, apoyándose moralmente en la lectura de La Biblia.

En 1992, otros dos pescadores de Kiribati, un archipiélago del Pacífico, sobrevivieron 177 días en el mar antes de llegar a Samoa. —AGENCIAS