Lo demás puede esperar

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Por José Portillo*

2018-02-12 8:46:57

Vivimos en un mundo con exceso de información a nuestra disposición. Si lo deseamos, podemos recibir noticias del mundo entero de forma inmediata y constante, por lo que hoy es más importante que nunca establecer prioridades, de tal forma que nos ocupemos de los temas que nos competen, como por ejemplo las elecciones municipales y legislativas de este 4 de marzo.

Debemos procurar una votación masiva. El artículo 73 de nuestra Constitución, numeral primero, establece como deber ciudadano ejercer el sufragio. Es decir, quien no participe del evento electoral estará incumpliendo un mandato constitucional. En adición, debemos recordar que la única forma de fortalecer la democracia es participando. Existen suficientes candidatos y formas de ejercer el sufragio como para quedarse fuera de esta fiesta electoral.

Es vital informarnos para seleccionar el candidato de nuestra preferencia. Votar por bandera es una forma primitiva de ejercer el sufragio, en la cual usted delega en la cúpula partidaria su derecho a elegir. Por ejemplo, si usted vota en San Salvador, tiene 196 candidatos a diputados de entre los cuales escoger, incluyendo cuatro no partidarios. Pregunto, ¿usted cree que todos son exactamente iguales? ¿No cree que vale la pena tomarse el tiempo de investigar y elegir uno?

El artículo 73, numeral 3, establece como deber político ciudadano “servir al Estado de conformidad con la ley”. Es decir, aquellas personas que han sido llamadas a integrar las juntas receptoras de votos tienen un deber constitucional que atender. Construir una democracia sólida es responsabilidad de todos; partidarios y no partidarios deben atender el llamado a defender la voluntad del soberano. Quejarse después de los hechos de nada servirá, sacrificar un domingo cada tres años es insignificante, comparado a las pérdidas potenciales de no hacerlo.

Tómese el tiempo de hablar con amigos, vecinos, compañeros de trabajo y familiares, sobre los riesgos de desentendernos de la política. Una ciudadanía informada, analítica y políticamente activa toma mejores decisiones. No es necesario pertenecer o simpatizar con un partido para activarnos políticamente, basta comprender que si no lo hacemos, quedamos a merced de los que si lo hacen, y puede que no tengan las mejores intenciones.

Estamos a menos de cuatro semanas del evento electoral; los presidenciables, el fútbol, la última serie de televisión, que si vamos a poder vivir en Marte, o que vino primero si el huevo o la gallina, todos estos y otros temas pueden esperar. Nuestra prioridad debe ser elegir a los mejores representantes que podamos tener en la Asamblea Legislativa, ya que éstos elegirán a la nueva Sala de lo Constitucional, al futuro Fiscal y otros cargos no menos importantes.

Las alcaldías también merecen su atención, la evolución y gestión de su municipio depende de ello. Es importante votar por un candidato cuyas propuestas vayan acordes a las capacidades financieras y competencias de la gestión municipal. No podemos seguir eligiendo a vendedores de humo, que juegan con los padecimientos de la población, a sabiendas de que sus propuestas son imposibles de cumplir.

Compatriotas, no se vale llorar sin aprender. Ya suficiente nos hemos quejado de la clase política. Es hora de salir masivamente a votar por rostro, para sacar a aquellos que en el pasado han incumplido sus promesas de campaña. Este 4 de marzo, ¡todos a votar!

Colaborador de El Diario de Hoy @jpelsalvador