Los últimos acontecimientos como ha sido el entendimiento entre partidos políticos, me han provocado una esperanza de que El Salvador pueda salir adelante y volver a sus épocas de gloria. Recuerdo que en un tiempo éramos el Japón de Centro América, el tercer exportador de café en el mundo y uno de los productores importantes de algodón. El salvadoreño es emprendedor, tiene garra, ingenio, coraje y habilidades. Es una pena que una lucha fratricida por ideologías diferentes nos haya llevado y nos siga llevando al despeñadero.
Analicemos como hermanos, como patriotas, como salvadoreños que somos, en base a nuestra idiosincrasia, lo que más le conviene a nuestro país. Ahora ya no tenemos que adivinar o inventar la pólvora, podemos por medio de la tecnología y la información, darnos cuenta de las corrientes ideológicas que han funcionado en otros países del mundo. Lo ideal no es un sistema sino una mezcla de sistemas.
El Capitalismo ha funcionado en Estados Unidos y lo ha hecho grande. La República Federal de Alemania es un Estado democrático, federal y social de Derecho, y es una potencia económica. El Japón es una Monarquía Constitucional y es otro ejemplo de un sistema democrático fundado en una democracia constitucional y en la separación de poderes: órganos Ejecutivo, Legislativo y Judicial.
Singapur se presenta como una República Parlamentaria Multipartidista con un Presidente y un Primer Ministro. Actualmente es uno de los países más prósperos y con mayor grado de libertad económica del mundo; sin embargo es considerado una dictadura o autocracia. La República Popular China se apoya en una estructura de poder que comprende tres ámbitos fundamentales: Partido, Ejército y Estado. La jefatura del Estado corresponde al Presidente de la República Popular China y el líder del Partido, a su Secretario General y el líder del Ejército es el Presidente de la Comisión Militar. En la realidad estos tres cargos están ocupados por un mismo hombre, Hu Jintao. Las medidas de orden capitalistas que han adoptado han convertido al país en una potencia económica.
Si analizamos nuestra realidad, vemos que el país necesita urgente dinamizar su economía, controlar la delincuencia, invertirle masivamente o lo que sea necesario, a la educación de forma decidida y generosa y simultáneamente invertir en salud. Pero para invertir, hay que generar fondos, por eso es importante tomar medidas que han funcionado en otros países como tener reglas claras de inversión, darle prerrogativas e incentivos al inversionista, bajar los impuestos, ofrecerle asesoría técnica, darle seguridad, etc. Implementar todas las medidas que otros países han tomado para reactivar la economía con resultados positivos. Quién con una luz se pierde.
También es imperativo elegir funcionarios capaces, honestos, sin importar su color político, para que puedan desarrollar una labor eficaz que beneficie al país. Así como una empresa entrevista profesionales y selecciona al mejor por su experiencia, por su capacidad, por sus títulos, así el Gobierno puede elegir a sus funcionarios. Que no sean amigos, parientes, partidarios o personas que por haber contribuido al Partido se les retribuye dándoles un puesto.
Chile en su momento, en el tiempo del general Pinochet, contrató a los “Chicago Boys”, que implementaron un sistema económico que los catapultó y fueron los responsables del “Milagro chileno”, que convirtió a ese país en uno de los más fuertes económicamente de Sur América.
Felicito a los partidos políticos por su patriotismo y los invito a que sigan adelante, trabajando unidos por el bien de la Patria y el futuro de este pulgarcito. Su esfuerzo complementado con el concurso del Gobierno se traducirá en éxito asegurado. Las futuras generaciones se los agradecerán y quedarán en la historia de nuestro país como los héroes que rescataron a El Salvador.
*Ingeniero. Colaborador de El Diario de Hoy.